Nueva York.— El gobierno de Nueva York anunció ayer que renunciaba, al menos por el momento, a su plan de limitar el crecimiento de servicios de taxis privados como Uber, acusados de contribuir al aumento en el congestionamiento vehicular en la ciudad.

En un comunicado, el vicealcalde Anthony Shorris indicó que la ciudad decidió no promover el proyecto de ley que está en el Concejo de Nueva York y que limitaría el crecimiento de las empresas de taxis privados en 1.0% al año.

Shorris expresó que la decisión será tomada hasta que la ciudad termine, a finales de noviembre, un estudio sobre el impacto que tienen estos servicios en el tráfico vehicular de la ciudad.

Explicó además que Uber, que había lanzado una agresiva campaña para resistir la limitación, se comprometió a mantener su tasa de crecimiento actual a fin de no inundar las calles con vehículos con nuevas licencias y a cooperar con el estudio proyectado.

La decisión termina así una disputa en que la empresa acusó al gobierno de afectar la creación de empleos, y en la que el alcalde Bill de Blasio expresó que “una corporación multimillonaria” como Uber no tenía derecho a dictar las políticas públicas.

El martes, el alcalde había propuesto al Concejo de Nueva York limitar el crecimiento de servicios de taxis como el de la empresa Uber, debido al impacto que generan al medio ambiente y al tránsito de la urbe. De Blasio proponía que todos los servicios privados de taxi con más de 500 vehículos tuvieran un crecimiento anual en sus flotillas que no sobrepase 1.0%. Notimex

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses