A bordo del avión papal.— El papa Francisco advirtió ayer acerca de echar la culpa a sólo una de las partes en el marco de la crisis griega y tuvo una opinión favorable del gobierno del primer ministro Alexis Tsipras, del partido Syriza. “No entiendo mucho de esto, pero sería fácil decir: la culpa es sólo de uno”, opinó en declaraciones a periodistas durante su vuelo de regreso de Asunción a Roma, adonde arribó ayer.

El Papa contestó 18 preguntas de 60 periodistas.

El Pontífice declaró que “los gobernantes griegos que llevaron (al país) a esa situación de deuda internacional tienen una responsabilidad y el nuevo gobierno heleno comenzó una revisión justa”.

El Papa también  instó a crear “un camino de vigilancia para que otros países no caigan en el mismo problema (...) Porque este camino de los préstamos y las deudas así no termina nunca”, señaló.

Francisco declaró que los movimientos populares  le gustan porque “se organizan entre ellos no sólo para hacer protesta, sino para ir adelante y poder vivir”, y destacó que “la Iglesia no puede ser indiferente. Tiene una doctrina social y tiene que dialogar” con ellos.

Durante su estancia en Bolivia el Pontífice se reunió con esos grupos. Ayer aseguró que el discurso que les leyó en esa ocasión “es simplemente la doctrina social de la Iglesia y no un texto político”.

Al ser cuestionado por un reportero alemán sobre  “¿por qué en el magisterio del Santo Padre existen tan pocos mensajes sobre la clase media, la ‘gente normal’, esa que trabaja y paga impuestos?”, Francisco  respondió: “Muchas gracias. Es una buena corrección, eh. Usted tiene razón. Es una equivocación por mi parte (no) pensar en esto. Haré algún comentario, pero no para justificarme. Pero usted tiene razón. Tengo que pensarlo”, señaló.

Además, el Papa exhortó a las partes en Colombia que avancen en el proceso de paz y ofreció la asistencia de la Santa Sede, al tiempo que dijo que “no es injusto” que Bolivia  se plantee una salida al mar y precisó que en Cuba no hubo mediación del Vaticano, sino “buena voluntad”.

Durante la misma ronda de preguntas, habló de la hermenéutica y la necesidad de contextualizar sus discursos ante algunas interpretaciones de sus mensajes. Señaló que “cada palabra, cada frase de un discurso puede ser instrumentalizada”. Aconsejó: “Ver todo el contexto por la situación, incluso ver la historia de ese momento o si estamos hablando de un momento, interpretar un hecho del pasado con la hermenéutica de ese tiempo”.  Agencias

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