Al menos cincuenta personas resultaron heridas hoy al producirse dos explosionesdurante un mitin electoral del opositor y prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) en Diyarbakir, en el sureste de Turquía, a sólo dos días de laselecciones generales del domingo.

Las detonaciones, cuyo origen aún no se ha confirmado, tuvieron lugar a las 14:55 GMT en una plaza de la oficiosa "capital" kurda de Turquía, donde se había congregado una muchedumbre, justo antes de la intervención del presidente del partido, Selahattin Demirtas.

Aunque inicialmente se habló de 10 heridos, el ministro turco de Salud, Mehmet Müezzinoglu, ha elevado la cifra a 50, de los que entre 20 y 24 han sido trasladados a hospitales.

Según dijo Demirtas poco después del incidente, hay varios heridos graves y algunas personas han sufrido la amputación de los pies.

El líder del partido indicó que no se sabía ni se trató de una bomba o de una detonación en un transformador eléctrico.

Sin embargo, el ministro turco de Energía, Taner Yildiz, ha rechazado que se debiera al estallido de un transformador.

"Hemos inspeccionado el transformador y es muy obvio que la explosión se produjo fuera, no dentro, porque la puerta está abollada desde fuera; además no presenta daños dentro", detalló Yildiz.

Un periodista local explicó a Efe por teléfono que se escucharon dos detonaciones, con un intervalo de tres minutos, cerca de una unidad de distribución eléctrica.

Tras el incidente, el canal de televisión kurdo Med-Nuçe grabó breves choques entre los simpatizantes del HDP y la policía desplegada en el área, que utilizó gases lacrimógenos, pero los disturbios no se generalizaron.

Demirtas llamó de inmediato a la calma y pidió que nadie se dejara arrastrar por provocaciones.

"El HDP no caerá en esta trampa. Ningún partido es nuestro enemigo. Pese a todas las provocaciones, pase lo que pase, mantendremos la disciplina hasta el final de las elecciones. Nunca os dejéis vencer por la furia" , pidió Demirtas en un emotivo discurso.

El HDP ha sido objeto durante la campaña electoral de decenas de ataques, que han causado varios heridos graves.

Al envío de dos paquetes bomba a oficinas del HDP en el sur de Turquía a mediados de mayo se sumó ayer una agresión nacionalista en Erzurum, en el noreste del país, donde la formación izquierdista celebraba un mitin.

Los atacantes incendiaron ayer un microbús del partido y causaron graves quemaduras al conductor, además de intentar linchar a otros participantes.

Un estallido general de violencia poco antes de las elecciones generales del domingo podría dar al traste con la aspiración del HDP de superar el umbral del 10 % para acceder al Parlamento.

Según los analistas, una violenta revuelta kurda volvería a despertar los temores de buena parte de la población turca, que asocia este partido a la guerrilla kurda.

ahd

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