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Rodolfo Ríos Garza presentó su renuncia como titular de la Procuraduría General de Justicia capitalina, cargo que desempeñó desde 2012, cuando arrancó la gestión de Miguel Ángel Mancera al frente de la Ciudad de México.

Ayer las autoridades locales, a través de un comunicado, informaron que la dimisión de Ríos Garza fue aceptada por el jefe de Gobierno. No se detalló el motivo de la renuncia.

El subprocurador de Averiguaciones Previas Centrales de la Procuraduría capitalina, Edmundo Porfirio Garrido Osorio, estará encargado del despacho en tanto se designe el nuevo procurador.

“El jefe de Gobierno agradece la labor que desempeñó el ahora ex procurador General de Justicia, demostrando en todo momento responsabilidad, honestidad, lealtad y eficacia en su trabajo; asimismo, le desea éxito en sus futuras aspiraciones y responsabilidades profesionales”, informó el gobierno central.

Renuncias firmadas. La dimisión de Ríos Garza se da una semana después del rumor de que Mancera había solicitado la renuncia a todos los integrantes de su gabinete.

La versión fue negada. Luego, el mandatario capitalino aclaró que todo su equipo ya tiene la renuncia firmada y está en constante evaluación de su desempeñó al frente de la dependencia de la cual son responsables.

También se da en el contexto de la recomendación de la Comisión de Derechos Humanos capitalina que consideró que hubo anomalías y violación a derechos en la investigación del caso del asesinato de cinco personas en la colonia Narvarte en 2015.

Así como el incremento del homicidio doloso en la capital del país, según un análisis del Observatorio Nacional Ciudadano, aunque autoridades capitalinas aseguran que hay delitos que van a la baja como es el robo de vehículo.

De acuerdo con la ley vigente, el jefe de Gobierno puede nombrar y remover al Procurador de Justicia capitalina con la aprobación del Presidente de la República.

En la Constitución de la Ciudad de México, que todavía no entra en vigor, se establece que el jefe de Gobierno tendrá la plena libertad de nombrar y remover al procurador sin la necesidad del visto bueno del Presidente.

Esto significa que el nuevo procurador local deberá contar con el aval del Ejecutivo federal

Rodolfo Ríos Garza es la baja número 11 en el gabinete de Mancera desde el 5 de diciembre de 2012. Algunos de los que han salido son el ex titular de Seguridad Pública, Jesús Rodríguez.

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