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De 2009 a la fecha, el Gobierno de la Ciudad de México ha realizado 2 mil 057 cirugías bariátricas; tan sólo en 2016 se registraron 512 intervenciones, el mayor número de cirugías en un año.

La Secretaría de Salud de la Ciudad de México detalló que tan sólo en la clínica Rubén Leñero se intervinieron a mil 427 pacientes y el resto de los procedimientos se llevaron a cabo en la clínica del Hospital General Tláhuac, en todos los casos se registraron resultados favorables.

Autoridades de la Secretaría de Salud capitalina indicaron que la obesidad mórbida es el tipo de sobrepeso más elevado y severo, debido a que llega causar serias enfermedades crónicas y también puede provocar discapacidad grave, por lo que el modelo integral que ofrece la Ciudad de México es una opción para cambiar radicalmente la calidad de vida de los pacientes con este problema.

De acuerdo con la secretaría el modelo de Tratamiento Quirúrgico y Multidisciplinario de la Obesidad se basa en un tratamiento integral que comprende la terapia sicológica, endócrina, física, nutrición, medicina interna, cardiología y la cirugía, que en su mayoría son de dos tipos: Manga Gástrica y Bypass.

“Son procedimientos en los que el bariatra cambia la anatomía del estómago y el intestino y ayudan a que los pacientes que serán sometidos a este procedimiento disminuyan rápidamente entre 40 y 80 kilos de peso pero, para poder lograr esta meta, deben hacer ejercicios y comer sanamente conforme a la dieta que se les recomienda”, precisó.

En estos casos, el cirujano es quien, con base a las características del paciente que será tratado, decide cuál es la intervención que le es más recomendable. Las observaciones se explica al paciente y se indican recomendaciones preoperatorias para una mejor preparación.

“Volví a nacer, mi vida cambió radicalmente. El primer cambio que sentí fue en la salud ya que por el peso, era sedentaria, dormía sentada, sentía mucho cansancio y una vida muy agitada, me dolían las rodillas y pies y con una hipertensión alta”, comentó Gisela. Ella, pesaba 142 kilos y con la cirugía de manga gástrica, que se le practicó hace un año en el Hospital General Rubén Leñero, bajó a 85 kilos.

Erika, otra paciente del Rubén Leñero quien se sometió al Bypass Gástrico, aseguró que “fue todo un proceso que cambio mi vida totalmente y estoy feliz, pesaba 153 kilos y bajé a 93. El más importante, la salud, tenía varias enfermedades y ya no tomo medicamentos para la presión y para evitar la diabetes”.

Para obtener una mayor información sobre el “Tratamiento Quirúrgico y Multidisciplinario de la Obesidad”, que desarrolla la Secretaría de Salud, los interesados pueden llamar a Medicina a Distancia al 51320909.

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