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En la remembranza del Día Internacional de la Mujer —recién conmemorado— Porfirio Muñoz Ledo está cierto de que el sexo femenino ha alcanzado un lugar preponderante en la vida pública de la República Mexicana.

La Ciudad de México, expone a EL UNIVERSAL, se encuentra a la vanguardia en la concreción de la paridad de género, misma que quedó mandatada en la recién elaborada Constitución capitalina.

Y ahora, considera, es tiempo —¿por qué no?— de que una mujer pueda llegar a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.

Si bien hay avances en la paridad, como es el caso del Congreso federal, señala, todavía existe un retraso en el tema de las gubernaturas y presidencias municipales, por ejemplo, que si bien son cargos de elección popular se pueden crear mecanismos legales para que en la competencia exista la equidad.

Las mujeres políticas capitalinas, destaca Muñoz Ledo, parece que se organizan ya para buscar un esquema de unidad que permita a una fémina gobernar la ciudad.

De los partidos políticos prefiere no hablar porque, dice, su condición de funcionario no se lo permite.

¿Considera que la mujer ha logrado integrarse a la vida pública de la República Mexicana?

—En todos los cargos de representación popular y de mando debiera haber mucho mayor equilibrio entre los hombres y las mujeres, es el sentido mismo del concepto de paridad de género que se aplica, en general, a rangos más bajos de la administración.

Respecto del tema de la Ciudad de México, me parece muy significativo que prácticamente todos los partidos políticos estén hablando de que la próxima persona al frente de la jefatura de Gobierno sea mujer.

Me parece un signo de salud y un despertar de la conciencia de las mujeres. Hay desde luego varones muy competentes para ocupar ese cargo, pero eso hay en todos los casos, siempre hay mujeres preparadas y siempre hay hombres preparados, no cambiaría la situación.

La Constitución de la Ciudad de México fue categórica no solamente en el tema de la paridad de género, sino en los medios para que esa paridad pueda ejecutarse.

También en la cuestión política somos muy enfáticos. El artículo 32 de la Carta Magna dice que la o el jefe de Gobierno debe garantizar la paridad de género en el gabinete.

Pero las realidades: en donde hemos avanzado más en toda la historia de México es en el Constituyente de la Ciudad de México. Hubo un número que generó paridad técnicamente: 51-41. La Mesa Directiva fue mayoritariamente de mujeres, eso fue una diferencia importante y eso es visible frente a la opinión pública.

En el Constituyente de 1917 no hubo ninguna mujer y no vayamos a constituciones anteriores.

En donde hemos avanzado un poco más es en las cámaras del Congreso de la Unión: 42 mujeres en el Senado sobre 128; 212 mujeres sobre 500 miembros de la Cámara de Diputados.

Pero el caso de los gobernadores: hoy sólo hay una mujer gobernadora, la de Sonora, Claudia Pavlovich, sobre 32 entidades federativas. Presidentas municipales que se supondría podrían ser un espacio más adecuado, más próximo a la gente en donde se antojaría que el papel de una mujer puede ser muy relevante, de 2 mil 240 ediles, sólo 284 son mujeres. De las delegaciones de la Ciudad de México, siendo una ciudad de avanzada, de las 16 sólo cuatro son ocupadas por mujeres.

Hay casos en los que son cargos de elección popular y no ganan las mujeres.

—Pero hay fórmulas; es decir, está perfectamente previsto en la legislación de otros países, cómo a través de las candidaturas se puede aproximar a la paridad. Nunca será perfecto. Pero por ejemplo, si hay en la Cámara de Senadores y de Diputados una cantidad mayor de mujeres, se debe a que la representación proporcional sí tiene reglas de paridad de género.

Todo eso se puede ir resolviendo a través de disposiciones legales.

La paridad no quiere decir que sean mitad y mitad, pueden ser más hombres en algunos casos y menos mujeres. Los europeos consideran que el rango de separación nunca debe ser superior de 60-40.

Los partidos políticos no suelen tener presidentas.

—El PRD tiene presidenta y secretaria general, que es una casualidad. Los rangos en materia de cargos directivos son 60-40, pero pueden estar de un lado o de otro.

Es sano que la paridad se produzca en todo el país, no me voy a pronunciar si prefiero una mujer en Baja California o en Yucatán, yo digo que se debe lograr ese equilibrio a nivel nacional.

En la actualidad la mujer todavía es víctima de violencia.

—Otro tema muy grave sigue siendo el comportamiento social hacia la mujer, ese es otro tema que no tocamos, el de la violencia de género, el tema del número de mujeres asesinadas.

En la antesala de 2018 muy pocas mujeres han levantado la mano para ser candidatas.

—Creo que en 2018 va a haber un cambio importante sobre eso, por lo que está ocurriendo, y digo por el efecto que va a tener la evolución en la Ciudad de México.

Este año en el Estado de México parece que estarán compitiendo mitad hombres y mitad mujeres para la gubernatura.

—Es un principio, no está mal y la moneda está en el aire. Dependerá del electorado, pero ya el hecho de que haya esa composición es un avance.

¿Usted a qué mujer ve al frente de la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México?

—No puedo pronunciarme sobre cuestiones electorales. Yo creo que hay varias mujeres sumamente valiosas y he leído, no lo he constatado, que van a hacer un movimiento conjunto, no digo que candidatura única, no. Por lo que ha trascendido, están dispuestas las mujeres de todos los partidos a lograr que haya candidatas.

¿Se puede lograr la unidad?

—Si tienen la voluntad política que corresponde a las declaraciones, sí lo pueden hacer.

¿El avance en la Ciudad de México en materia de equidad se verá aterrizado en 2018?

—Creo que se debe aterrizar de aquí al 18, auguro que para las elecciones que vengan de aquí a 2018 va a haber un avance sustantivo de las mujeres y espero que en el 18 lo haya también.

¿Ve varias candidatas presidenciales para el 2018?

—Para la Presidencia de la República, siendo muy valiosas las candidatas que ha habido, ha sido más bien simbólico, marginal, como puede ocurrir en la elección de 2018.

¿Cómo ve el avance de Morena en la Ciudad de México?

—No puedo pronunciarme en cuestiones electorales. Veo estadísticas, encuestas. Las encuestas así lo dicen, veremos resultados de las elecciones.

¿El PRD se desmorona?

—No voy a hacer juicios sobre partidos políticos, está al margen de mi competencia, sobre todo siendo funcionario de la ciudad. Yo tengo una percepción, la gente tiene su percepción y las encuestas hablan.

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