Gran polémica se ha desatado por la forma en que el gobierno entrante habrá de decidir el destino del aeropuerto que se construye en Texcoco. El próximo s ecretario de Comunicaciones y Transporte , Javier Jiménez Espriú, ya no ve la suya y cada entrevista o cada vez que tiene que hablar sobre el tema, le resulta más complejo justificar lo que difícilmente tiene justificación.

En repetidas ocasiones, se le ha escuchado decir a él y a otros actores políticos vinculados con Morena o el próximo gobierno, que la consulta responde a factores que atienden el interés social y político de los mexicanos; sin embargo, especialistas en la materia han manifestado que no existe opción, paralela al proyecto de Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), con que se permita solventar la necesidad de movilidad aérea de la Ciudad de México.

Y lo polémico no sólo es además la sospecha de que ya se tomó la decisión por parte del próximo gobierno en el sentido de no continuar con la construcción del aeropuerto proyectado en Texcoco; la mayor controversia está en el método o procedimiento que han decidido para poder fundamentar el que no se realice , es decir la llamada consulta que no sé si sea ciudadana o realmente sea corporativa.

Jiménez Espriú, en la limitada posibilidad con que cuenta para justificar la aplicación de la referida consulta, ha llegado a decir el siguiente fraseo: la consulta no es legal, pero tampoco ilegal (“sino todo lo contrario, chatos”, diría el clásico del humor). Es una verdadera joya lo que ya ha quedado expuesto.

Y es que el gobierno por entrar aún no cuenta con facultades legales para aplicar este ejercicio y lo puede hacer solo como una buena práctica ciudadana, siempre y cuando el resultado únicamente oriente para la toma de una decisión, sin que este sea vinculante, a final de cuentas, esta es la verdadera polémica.

La verdad sea dicha, es que para todos aquellos que difícilmente volamos por actividades laborales o de esparcimiento, poco importa en lo particular si se moderniza o perfecciona un sistema de transporte como es el aéreo; sin embargo, hay sectores vinculados con actividades empresariales de importación y exportación, así como el de turismo, que sí requieren de certeza y de un servicio eficaz y eficiente.

Por cierto, valdría la pena escuchar la opinión de quien será el secretario de Turismo en el gobierno entrante, con el fin de tener clara la posición de esa importante secretaría; ya que el turismo es fundamental para la economía no sólo de la ciudad de México, también de un número importante y vasto de entidades de la República Mexicana que, en el caso de muchas de ellas, su mayor ingreso económico es consecuencia de esta actividad.

DE REFILÓN.

Hoy ya se convierte en crisis para nuestro país el proceso migratorio que se presenta en nuestra frontera sur y todo parece indicar irá en crecimiento ante la falta de oportunidades para mejorar la vida de los países de Centro y Sudamérica.

La posición geográfica de México, hoy de acuerdo con la política internacional, no es nada envidiable. Hacia el sur, los serios problemas políticos, económicos y sociales que enfrentan los países centro y sudamericanos; y hacia el norte, nuestra frontera con el país más poderoso del mundo y con un impredecible presidente que gobierna todo dependiendo de su estado anímico.

El trabajo por venir no es menor para quienes serán los responsables en materia de inmigración y para el próximo canciller Marcelo Ebrard Casaubón. Es innegable que este tema dará mucho de que hablar.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses