Juchitán.— Los comuneros zoques de San Antonio y Benito Juárez, del municipio de San Miguel Chimalapa mantienen retenidos desde el pasado sábado a un agente del Ministerio Público, a un comandante de la Agencia Estatal de Investigaciones y un helicóptero del gobierno oaxaqueño.

La reunión prevista para este miércoles entre funcionarios de los gobiernos federal y de Oaxaca con los comuneros chimalapas  se suspendió.

La comisión gubernamental encabezada por el director de Gobierno de la Secretaría General del Gobierno de Oaxaca (Segego), Rodrigo Velázquez, tenía el propósito de verificar los daños ambientales que denunciaron.

Sin embargo, la visita se canceló debido a que los funcionarios no quisieron trasladarse por tierra y no convencieron a los comuneros de que permitieran el despegue del helicóptero del gobierno de Oaxaca retenido desde el sábado.

Tras este hecho, los pobladores de ambas localidades zoques acordaron mantener retenidas a las autoridades, a los dos pilotos y el helicóptero, informó Juan Velázquez, agente municipal de Benito Juárez.

“Nosotros estamos esperando que llegue el helicóptero para reunirnos con los comuneros zoques y hacer las inspecciones sobre los daños ambientales que han denunciado las autoridades chimalapas”, dijo Velázquez García.

Por su parte, el presidente de los comuneros de San Miguel Chimalapa, José Medel Jiménez —quien también permanece en calidad de “arraigado” en San Antonio—, dijo que los compañeros de San Antonio y Benito Juárez temen que los pilotos retenidos se vayan y en lugar de traer a los funcionarios, ya no regresen.

Hasta las 13:00 horas de ayer los funcionarios no tenían certeza si las comunidades de San Antonio y Benito Juárez permitirían la salida del helicóptero. En ese ambiente de tensión, la comunidad zoque de San Francisco la Paz, expresó su solidaridad con las acciones de San Antonio y Benito Juárez y demandó que el gobierno federal desaloje a los chiapanecos que desde hace tres años han invadido varios parajes en la zona de San Isidro la Gringa, una extensión de 42 mil hectáreas que los chimalapas recuperaron en 1994.

En un comunicado, las autoridades de San Francisco la Paz recordaron que el 26 de abril de este año la Policía Federal desalojó a los invasores y detuvo a 26 talamontes chiapanecos, sin embargo, insistieron en la necesidad de que sean desalojados los chiapanecos asentados en los parajes de río Pescadito y La Reforma.

El conflicto entre los chimalapas y los chiapanecos resurgió el jueves 29 de septiembre, cuando los zoques de San Antonio detuvieron al presidente de los ejidatarios del poblado chiapaneco Rodulfo Figueroa, quien se identificó como Ángel López Sánchez y fue detenido en el paraje El Quebrachal, cuando talaba árboles.

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