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Uruapan.— La detención de dos sujetos armados en la colonia Zapata de Uruapan generó, por varias horas, bloqueos en al menos cuatro accesos de esta ciudad a manos de presuntos ex autodefensas, que dejaron dos transeúntes lesionados de bala cuando les intentaron robar la camioneta en la que viajaban.

De acuerdo con informes de la Procuraduría del estado, uno de los detenidos cuenta con una orden de aprehensión por el delito de secuestro. Se trata de Ignacio Quevedo Hernández, quien, junto con el otro hombre, son liderados por el jefe de plaza del municipio, Javier Guerrero.

La detención se llevó a cabo durante el despliegue de las fuerzas federales y estatales en la colonia Zapata, donde las personas armadas se identificaron como integrantes de la Fuerza Rural.

Al no lograr comprobar los orígenes de sus armas y el registro legal para portarlas, las dos personas fueron trasladadas a las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) con sede en Uruapan.

En respuesta, un grupo armado, de las otrora autodefensas, bloquearon una de las entradas del municipio para exigir la liberación de sus compañeros, detenidos por elementos de la Base de Operaciones Mixtas.

Estos bloqueos se extendieron a por lo menos dos accesos más de la ciudad, donde gente armada con fusiles de asalto advirtió que de no ser liberados por las autoridades, harán lo necesario para rescatarlos.

Estas acciones generaron pánico entre los pobladores, porque los civiles armados dejaron en el camino dos automovilistas lesionados de bala cuando les intentaron robar su vehículo. Además, se apoderaron de tres camionetas y dos unidades particulares, tras despojar a sus conductores con rifles de asalto en mano, después de que fueron perseguidos.

Entre las acciones de los civiles armados se registraron dos enfrentamientos con elementos de la fuerza pública, luego de que los criminales se atrincheraran al interior de un banco ubicado sobre avenida Latinoamericana, a dos cuadras de las instalaciones de la PGR, donde se encontraban los detenidos.

Como resultado, diez personas más fueron detenidas, luego de lidiar a golpes, con palos y piedras, con elementos de la Policía Michoacán, y llevadas ante el Ministerio Público Federal en Morelia.

Ante la amenaza de que serían rescatados, los detenidos fueron trasladados vía aérea a las instalaciones de la Delegación de la PGR en Morelia, donde a través de la Subprocuraduría de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo integraron una carpeta de investigación en su contra, como presuntos responsables de la comisión del delito de violación a la Ley de Armas de Fuego.

A los hoy implicados se les encontró entre sus pertenencias un arma de fuego tipo fusil AK-47, mejor conocido como Cuerno de Chivo, con un cargador y 145 cartuchos útiles, así como un arma de fuego tipo escuadra, con su cargador abastecido con 6 cartuchos útiles y 5 cargadores.

De acuerdo con la PGR, el Ministerio Público de la Federación continuará con la integración de la indagatoria para, en su momento, obtener los datos de prueba necesarios y estar en posibilidad de judicializarla y dar paso a la Audiencia Inicial.

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