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Monterrey

Las redes sociales son un arma de doble filo. Sirven para dar a conocer noticias útiles, mensajes edificantes y solidarios pero a la vez se han convertido en el moderno “lavadero” donde se difunden chismes y son caldo de cultivo para delitos como la calumnia, chantaje, el secuestro y hasta el asesinato.

Especialistas en sicología infantil y analistas de las redes sociales hablan para EL UNIVERSAL sobre el fenómeno mediático de las nuevas tecnologías y sus implicaciones en las relaciones de familia, amistad, noviazgo, trabajo y su impacto en la sociedad.

El pasado 3 de junio, con el comentario “No sabía si enojarme, reír o llorar”, Edilberto compartió en su perfil de Facebook el video donde su hija Paula de nueve años le pide permiso para tener novio, el cual le fue negado por su corta edad.

El video alcanzó en una semana 2.7 millones de reproducciones, se compartió más de 75 mil veces y generó 800 comentarios, la mayoría reconociendo la apertura y lo “alivianado” del padre, la inteligencia y valores morales de la niña, así como la relación de confianza y respeto entre ambos.

Edilberto declinó conceder una entrevista a este diario porque nunca pensó que el asunto se viralizara; comentó que su hija está bien y no ha sufrido acoso. Sin embargo, los expertos en conducta infantil y analistas del fenómeno de las redes sociales consideran que debido a la divulgación masiva del diálogo en el corto plazo la menor podría sufrir algunas consecuencias de bullying, además de aislamiento, pues algunos padres aconsejarían a sus hijas que no se juntaran con ella por su aparente precocidad.

Marco Tulio Garza González, secretario técnico de Investigación de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), comentó que al difundir cuestiones familiares, privadas o personales en Facebook se favorece la intromisión de personas extrañas.

Agregó que en el video de la pequeña Paula se tratan cuestiones comunes y normales en una familia, pero gracias al uso inadecuado de las redes sociales esto ya no es íntimo y todos los que comentan pretenden participar en la toma de decisiones sin tener por qué hacerlo ni contar con elementos de contexto.

“Las redes sociales son un arma de doble filo, su manejo es muy delicado, y ahí el factor de familia es el que debe estar súper fuerte para que la niña no resulte afectada”, dijo el investigador. Aconsejó que se ponga atención en la escuela para que la menor no sea objeto de bullying.

Natalia Carlos Ruedas, coordinadora de Psicología Infantil de la UANL, dijo que el video podría servir para que los padres se abran a dialogar con los hijos sobre temas que les preocupa, por la confianza y apertura que se percibe en el diálogo.

Explicó que todos los niños de esa edad tienen esas fantasías, y más ahora que la comunicación masiva y de redes sociales está invadida de imágenes y mensajes sexualizados.

“Pero no está en la mente del niño hacer las cosas con la intención que hacemos los adultos”, mencionó.

Comentó que en la clínica (de Psicología Infantil) escuchan cosas muy fuertes sobre lo que ven los niños y cómo actúan. “Hay menores de 12, 13 años, desnudándose ante la cámara y los padres ni cuenta se dan, se enteran por terceras personas”, señaló.

Hay un riesgo muy grande de que los niños usen las nuevas tecnologías sin restricción, afirmó, y mencionó casos en que los compañeros acosan a las niñas y las empiezan a extorsionar, “hay niños de 10 años haciendo ésto, pero también hay adultos que se hacen pasar por jovencitos”.

Sin cuidado. Los padres en general, afirmó, no estamos cuidando a nuestros hijos; les damos todas las herramientas tecnológicas de manera libre, sin ninguna restricción.

Por ejemplo, Facebook debería estar prohibido para niños y adolescentes; pero lo tienen y lo usan de la manera absurda, porque sus padres o hermanos mayores les abren cuentas y luego no vigilan cómo interactúan.

Dijo que ella por ejemplo, no sube a redes fotos suyas ni de sus hijos, pues los expertos en seguridad recomiendan no hacerlo y ni siquiera exhibirlas en los escritorios de la oficina.

La maestra Bella Aurora Garza, especialista en psicología infantil y laboral, ex directora de la Facultad de Psicología de la UANL, dijo que Facebook y otras herramientas son útiles porque nos mantienen al día, pero debemos tener cuidado con el uso que hacen los niños y adolescentes.

Luis Antonio Lucio, investigador experto en redes sociales, dijo que debe promoverse una buena comunicación entre padres e hijos, para evitar que los jóvenes sean objeto de maltrato y violencia, además de brindarles cariño y comprensión, para evitar que busquen suplir esas carencias con tiempo y convivencia en el ciberespacio.

Mencionó que de acuerdo a un estudio en preparatorias de la UANL, debido a que en lugar de apoyo reciben regaños o sanciones, los jóvenes no comunican a sus padres que son maltratados en redes sociales, o son chantajeados con difusión de fotos o videos de la intimidad, si no acceden a las peticiones de sus acosadores.

El autor de los libros Bullying en prepas y Escuelas sin miedo, sugirió sobre todo a los jóvenes, ser cuidadosos en lo que se comparte en Internet, pues lo que es nuestro, pasa en cierto modo a convertirse en patrimonio de todos y se pueden recibir elogios, pero también agresiones y descalificaciones.

Cuando ocurren las críticas, la víctima sufre un perjuicio psicológico, primero en su autoestima, en su salud mental, y a veces esos comentarios quedan en el ciberespacio, son imborrables. O igual pueden ser olvidados, pero si ahí quedan, pueden ser reactivados en cualquier momento, señaló el investigador.

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