Amas de casa, obreras y empleadas concentran tres cuartas partes de los 765 asesinatos de mujeres en Sinaloa, en los dos últimos sexenios estatales, reveló Teresa Guerra Ochoa, titular del Colectivo de Mujeres Sinaloenses.

Guerra Ochoa encabezó la solicitud formal para que se decrete en cinco municipios de la entidad la alerta de género. Observó que la violencia contra las mujeres es menor entre las profesionistas.

Con pancartas y vestimenta de color negro un grupo de mujeres exigió el cese a la violencia con la consigna “ni una más”.

En el documento que la titular del colectivo de mujeres presentó como sustento a la petición de que el Gobierno Federal declare alerta de género en los municipios de Ahome y Culiacán, reseñó que del 2005 a la fecha, el número de llamadas de auxilio de mujeres a las líneas de emergencia, creció.

Teresa Guerra precisó que sólo en la capital del estado, se tienen cuantificadas, 10 mil 200 llamadas, anuales de mujeres víctimas de violencia en hogares, centros de trabajo, escuelas o en la vía pública que no son atendidas.

La luchadora social observó que pese a que en 2012 se aprobaron reformas a la ley para tipificar el delito de femenicidio en Sinaloa con sanciones más fuertes, los asesinatos de mujeres a manos de familiares o ex parejas, continúan.

Hizo notar que preocupa que los homicidios dolosos de mujeres vayan en aumento, como reflejan las estadísticas oficiales, en las que se asienta que en el anterior sexenio hubo 356 casos y en lo que va de esta administración se suman 409 muertes.

Dio a conocer que de manera oficial se solicitó mediante el Instituto Nacional de las Mujeres, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, se declare la alerta de género en cinco, de los 18 municipios del estado, donde se concentran los mayores casos de violencia y asesinatos.

Guerra Ochoa reflexionó sobre el tema de la impunidad que alienta a esta clase de delitos que sufren las mujeres. Aclaró que en el sexenio anterior, se integraron cinco mil 884 denuncias por violencia intrafamiliar mientras que en este sexenio la cifra creció a nueve mil 339 casos.

"Se tienen casos escandalosos" comentó, el más reciente fue registrado en el municipio de Guasave, donde Irasema Urias, víctima de la violencia intrafamiliar, buscó ayuda por la vía judicial y encontró la muerte, presuntamente a manos de su ex pareja.

El juzgado de lo familiar que conoció su caso, expidió una orden de restricción para su ex pareja y dispuso que se le brindara protección, pero esta sólo tuvo vigencia de sesenta días y no fue renovada por la Policía Municipal.

La luchadora social documentó, como parte de su solicitud, el caso ocurrido en enero del 2015, en la plazuela Vicente Guerrero del municipio de Navolato, donde Ana Cecilia N atada con una soga, la boca tapada y desnuda, fue exhibida por su esposo, Jorge Luis Sánchez Montoya de 51 años. El perpetrador con ayuda de un familiar, sacó a su cónyuge de su hogar, sin ropas, la ató y la trasladó a la plaza pública donde la arrastró. El atacante fue detenido y puesto a disposición del ministerio público.

La titular del Colectivo de Mujeres Sinaloenses recordó que el agresor, salió libre en pocas horas y pese a que se solicitó que se revisará el caso, por haber incurrido en varios delitos, la autoridad judicial no actuó.

msl

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