La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) aprobó la realización de la reunión pública de información sobre el proyecto “Parque Cancún”, a desarrollarse en terrenos donados por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) al municipio de Benito Juárez en 2007 y en una porción del área natural protegida “Manglares de Nichupté”.

La reunión pública de información forma parte del proceso de consulta pública que se abrió el tres de febrero pasado a solicitud de uno o varios ciudadanos respecto al proyecto, sometido al Procedimiento de Evaluación del Impacto Ambiental (PEIA), por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), el 21 de diciembre pasado.

La finalidad de la consulta pública y de la reunión de información, contempladas en la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (Legeepa), es que la comunidad ejerza su derecho de participar y hacer comentarios sobre los beneficios o perjuicios de proyectos a desarrollarse en su localidad.

Será el 24 de febrero cuando se lleve a cabo la reunión pública de información, en la Universidad del Caribe (UNICARIBE), ante la presencia de funcionarios de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA), de la delegación de la Semarnat en Quintana Roo; de la Secretaría de Ecología del estado y  de representantes del gobierno municipal.

La Conanp hará la presentación del proyecto, habrá espacio para resolver preguntas y respuestas y las personas inscritas previamente tendrán oportunidad de exponer sus observaciones técnicas de viva voz.

El proyecto “Parque Cancún” busca desarrollarse en dos lotes que suman un total de 243.41 hectáreas colindantes con el Sistema Lagunar Nichupté, con una inversión de mil 296 millones 058 mil 700 pesos, para actividades de la obra, incluyendo la implementación de las medidas de prevención y mitigación.

La superficie del predio es un humedal en donde predominan los manglares, los petenes y la sabana, así como selva mediana, baja y vegetación secundaria. Una sección del total del predio está previamente impactada por actividades humanas y eventos naturales como el huracán Wilma (octubre de 2005) de acuerdo con la consulta hecha por EL UNIVERSAL al proyecto ejecutivo.

En el “Parque Cancún” se pretenden habilitar una plaza central y un lunario, un petenario, plazas, áreas deportivas, un skatepark; zonas culturales con museos y un foro; un vivero, un jardín botánico, una Unidad de Manejo Ambiental (UMA) para la atención y rehabilitación de fauna nativa, accesos, andadores, vialidades, estacionamientos, ciclopista y áreas jardinadas.

Se contempla también la construcción de oficinas las delegaciones de la Semarnat, la Conanp y de la Profepa.

De la superficie total, 53 hectáreas corresponden al área de aprovechamiento, lo que equivale a casi el 22 por ciento del predio; el 78 por ciento de la superficie se destinará como área de conservación. La vida útil del “Parque Cancún” está calculada para 100 años.

El antes Ecopark

La superficie de uno de los lotes que integran el proyecto es de 107.67 hectáreas pegadas a “Malecón Tajamar”. El lote recibe el nombre de “Ecoparque Cancún”, porque esos terrenos fueron donados por el Fonatur al municipio de Benito Juárez, el 21 de septiembre de 2007, para desarrollar un Parque Ecológico Urbano.

Con ese objetivo se conformó en agosto de 2009 un patronato de empresarios que dijeron haber aportado individualmente 15 mil dólares. El proyecto –conocido entonces como Ecopark o Grand Ecopark- fue presentado al entonces director del Fonatur, Miguel Gómez Mont un mes antes.

El patronato –se informó en esa época- estaba conformado por los empresarios Carlos Constandse, socio de Experiencias Xcaret; Luis Cámara, actual presidente del Consejo Coordinador Empresarial y del Caribe (CCEyC); José Chapur, presidente del Grupo Palace; Eduardo Solís, Edgar Villajuana –ex director local del Fonatur-; Johannes Lubbe, Eduardo Castro, Eduardo Albor, presidente de Dolphin Discovery; Oscar Constandse y Carlos Quintana.

También por Romárico Arroyo, Armando Millet, Rafael Aguirre, Octavio Lavalle, Luis Reynoso, José Luis Martínez, Alexis Saad, Ramón Abascal, Alex Krantzberg, Ernesto Zedillo, Salvador Vidal, Rafael Obregón, René del Castillo, Javier Carlos Olvera, el expresidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Rodrigo de la Peña y el actual dirigente, Carlos Gosselin.

Además, Moisés El-Mann Arazi, del Grupo E-Desarrollos; los ex presidentes del CCEyC, Francisco Córdova y Rafael Lang; Margarita Lliteras, Alejandro Pérez, Jorge Navarro, Rafael Obregón, el presidente honorario de los hoteleros, Abelardo Vara, Roque González Escamilla; Fausto Zapata, el director de la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC) Jesús Almaguer, y Gregorio Sánchez, quien en esa época era el alcalde de Cancún.

Estuvieron incluidos en su momento, los ya fallecidos Fernando García Zalvidea, fundador de Best Day y presidente de Real Resorts, y Roberto Cintrón, ex presidente de los hoteleros.

La donación de esas 107.67 hectáreas –junto con otras 5.4 hectáreas dentro de Malecón Tajamar- forma parte del 10 por ciento de terrenos que Fonatur estaba obligado a entregar al municipio en términos de la Ley de Fraccionamientos.

La escritura pública correspondiente obliga a que el Parque se destine a la conservación de flora y fauna local, con zonas para actividades físicas, recreativas y culturales; contar con un zoológico de la Península, Jardín Botánico, áreas de refugio para animales rescatados; áreas verdes con asadores y comedores públicos.

Asimismo, senderos de contemplación, instalaciones deportivas un bloque de museos -Museo de la Ciudad, Museo de la Cultura Maya, Biblioteca Central, Museo del Niño-; y un Teatro al aire libre con su concha acústica.

Porción impactada de “Manglares de Nichupté”

Sumado a los terrenos del “Ecoparque Cancún” de 107 hectáreas, está el segundo lote de 135.74 hectáreas dentro de las más de cuatro mil hectáreas decretadas por el entonces presidente, Felipe Calderón, como área natural protegida con categoría de Área de Protección de la Flora y Fauna “Manglares de Nichupté”.

Ese segundo lote está en la llamada Subzona de Uso Público 2 de la ANP, en donde operó en los años 80 el primer tiradero de basura de Cancún, conocido como “Lote 5”.

Entre el 2004 y 2005 la basura se depositó ahí, nuevamente, al saturarse las celdas del Relleno Sanitario, lo que terminó por impactar el sitio. Con el crecimiento de la ciudad, se construyó colindante a él, un Autódromo, el Poliforum y el CRIT.

La subzona abarca dos polígonos con una superficie de 171.25 hectáreas, de las cuales sólo se utilizarán 135.74.

En 2013, durante el último año de gestión del entonces alcalde, Julián Ricalde, se aprobó en sesión de Cabildo la conformación de un Fideicomiso para permitir al Patronato Ecopark, la creación y operación del parque urbano, “de carácter público”.

Para fusionar los lotes involucrados y realizar el manejo, operación y mantenimiento del Parque Cancún, el 29 de septiembre de 2014, la coordinación regional de la Conanp, a cargo de Ricardo Gómez Lozano y el Patronato del Ecopark A.C. titulado por Carlos Constandse Madrazo, firmaron un convenio de concertación.

Para el 30 de noviembre del 2015, tanto la Comisión como el patronato, signaron otro convenio con el gobierno de Quintana Roo, a través de la titular de la Secretaría estatal de Turismo, Laura Fernández, para la elaboración “coordinada” la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) modalidad Regional y el Estudio Técnico Justificativo (ETJ), a fin de obtener el cambio de uso de suelo en terrenos forestales para el proyecto.

spb

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