Autoridades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente atienden el encallamiento de un buque granelero en Barra de Navidad, Jalisco, el cual fue arrastrado a un banco de piedras tras el paso del huracán Patricia.
La dependencia informó que debido a estos hechos el cuarto de máquinas del barco de bandera mexicana y de nombre “Llantitos” se dañó, lo que provocó un derrame mínimo de hidrocarburos sin afectar al medio ambiente.
Detalló que la nave de 223 metros de largo, 33 de ancho y 38 mil toneladas de peso era tripulada por 27 personas, y quedó inmovilizado en las inmediaciones de Punta Graham, Barra de Navidad, Jalisco, y a 43 kilómetros al noroeste de Manzanillo, Colima.
Al acudir al lugar, personal de la Profepa en Jalisco, en coordinación con elementos de la Secretaría de Marina (Semar), constataron que el buque resultó con fisuras en áreas sensibles, principalmente en el cuarto de máquinas, con grave riesgo de daños mayores.
De acuerdo con los primeros peritajes, el daño ocurrió en el primer fondo del barco, donde se ubica el cuarto de máquinas, motivo por el cual hubo presencia de una cantidad mínima de hidrocarburos en capa milimétrica en el mar, el cual normalmente se evapora entre seis y 12 horas sin afectar al medio ambiente.
Por lo anterior el capitán de la embarcación realizó una llamada de emergencia por lo que la Armada de México acudió a su rescate a bordo de un helicóptero MI-17 de la Marina, el cual sobrevoló la embarcación y evacuó a 19 de sus tripulantes, mientras que ocho más se quedaron voluntariamente para resguardar la embarcación.
Por lo anterior, el Plan de Auxilio de la Marina hacia la población civil, continuará vigente en caso de emergencia para atender cualquier otro incidente que pudiera haber causado el entonces huracán Patricia.
jram