aridiana.banos@eluniversal.com.mx

El productor Omar Suárez está dispuesto a seguir con la función de Amor eterno a como dé lugar, incluso, si es necesario, hacer la función en la vía pública con tal de cumplir con la gente que ya ha comprado boleto.

“Vamos a dar función, no sabría decir si va a ser en el teatro, en la calle, pero lo vamos hacer, esa es mi garantía con el público, porque tenemos los elementos legales que lo permiten. Lo que pasó es un acto arbitrario, fuera de orden y de la ley”, dijo Suárez.

En este momento el futuro del musical es incierto, debido a que la noche del domingo, durante su estreno, personal de la delegación Cuauhtémoc, con el apoyo de representantes del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (INVEA), clausuraron el Teatro San Rafael en el momento que la compañía realizaba su segunda función.

“No hubo explicación, porque fue tan cobarde la autoridad que dejó pegado en un muro la notificación de clausura. Insisto, todo está en regla y este mal procedimiento puso en pánico a la gente. Se levantó una denuncia en contra de quien sea responsable de haber puesto estos sellos, sin el protocolo necesario para hacerlo”, comentó el hacedor de musicales como Perfume de gardenias.

Suárez consideró que la forma de proceder de la directora jurídica y de gobierno de la delegación Cuauhtémoc, Zuleyma Huidobro, fue un “total desatino”, incluso aseguró que puede desmentirla respecto a que dejó libre la salida de emergencia para que el público abandonara el lugar, cuando los sellos de clausura ya estaban colocados. Suárez dijo contar con fotografías y 50 testimonios de personas del público que ya han sido integradas en la carpeta de investigación que creó el ministerio público.

“Lo correcto era sacar a la gente del teatro, notificar, prohibir la función o lo que tuvieran que hacer, pero no proceder como lo hicieron, nunca sellar, porque quitarlos es un acto ilegal que se castiga con cárcel, entonces no podíamos abrir las puertas ¿a cuánta gente se puso en riesgo?”

El productor señaló que ahora sólo le queda esperar a que la ley resuelva, con la esperanza de que los sellos de sean retirados antes del viernes.

En caso que esto no se arregle antes del viernes, Omar Suárez tendría otro problema, porque requiere la venta del 80% de la taquilla para cumplir con los gastos diarios. Es decir, aproximadamente un millón de pesos por función, tan sólo para cubrir gastos como salarios de 100 personas. Omar Suárez dijo contar con el apoyo de su elenco, que incluso está dispuesto a dar la función donde sea.

Google News

Noticias según tus intereses