aridiana.banos@eluniversal.com.mx

En silencio pero con la misma emoción que cualquier espectador expresa al final de una función con un fuerte aplauso, el público que disfrutó la noche del viernes de Los Bonobos alzó sus manos y giró sus muñecas en señal de reconocimiento a la actuación que Zuria Vega, Alberto Guerra, Pía Aun, Georgina Levín, Efraín Berry y Daniel Tovar, realizaron arriba del escenario.

Sí, se trataba de un público compuesto en su mayoría por sordos y que por primera vez disfrutaron de esta puesta en escena, teniendo frente a ellos a cuatro traductores al lenguaje de señas para disfrutar la obra.

“La gente de Mejor Teatro se acercó a nosotros para que les ayudáramos, para que esto fuera inclusivo y tuviera el lenguaje correcto, que no pusieran sordomudos o personas con capacidades especiales, que son cosas que a veces se ponen y está mal dicho, ellos querían ser correctos y hacer las cosas bien”, explicó la doctora Consuelo Manero, de la Universidad Marista.

La catedrática comentó que esta es la segunda función de Los Bonobos en la que tanto ella como sus compañeros Rodrigo Rivera, Fernanda Ramírez y Daniela Vite, participan replicando los diálogos con el lenguaje de señas mexicano. Pero desde que se preparaba esta obra para su estreno, trabajaron con Efraín Berry, quien da vida a un personaje mudo, para que dominara a la perfección este sistema, así que la obra no les era desconocida.

Esta situación se notó durante las casi dos horas que duró la función del viernes, cuando la gente reía a carcajadas mientras ellos cuatro traducían a toda velocidad lo que los actores decían en el escenario.

“Nosotros cambiamos todo el texto a sordo para poderlo hacer en señas más fácilmente. Estaría muy bien que se hiciera esto en las obras de teatro, que toda la televisión tuviera subtitulaje para que los sordos de verdad puedan estar metidos en todo lo que sucede en la vida”, subrayó Consuelo Manero.

Google News

Noticias según tus intereses