"The Revenant”, escribió Emmanuel Lubezki en enero pasado a EL UNIVERSAL, “es la película más difícil en la que he trabajado”.  “En términos de mi habilidad como cineasta y de mi capacidad física, di todo lo que me fue posible”, apuntó brevemente en un texto.

“El Chivo”, como es conocido en el medio cinematográfico por su cabello ensortijado logró el domingo obtener su tercer premio Oscar consecutivo.

Ya lo hizo con "Gravedad" y "Birdman", luego de haber sido nominado en cinco ocasiones pasadas, de las cuales salía con las manos vacías.

Cuando era estudiante del CUEC, de la UNAM, a Emmanuel Lubezki no se le veían grandes facultades en la fotografía y, mucho menos, que quisiera dedicarse a ella.

Lubezki dirigió algunos cortos, entre ellos uno titulado Ejercicio 2o. año, donde mostraba que esa no era su área. La historia aborbada las alucionaciones de clase y sexistas de un joven cuando se sube con su pareja en un taxi a media noche.

De esa etapa en su vida, se cuenta que decía no querer involucrarse con los actores, pero sí permanecer todo el día en el set.

“El Chivo”, quien debe su apellido a sus abuelos paternos, originarios de la Unión Soviética, recibió su primera cámara cuando tenía 10 años de edad, para la cual gastaba su dinero con el fin de tener rollos.

La leyenda urbana dice que junto con el cineasta Alfonso Cuarón (Niños del hombre e Y tu mamá también), que se convertiría en su mancuerna creativa, y Luis Estrada (La ley de Herodes y El infierno) fue expulsado del CUEC por un trabajo escolar.

Pero hay quienes dicen que no fue así, otros que ya había terminado sus cursos y unos más que no pasó nada, por eso regresa a dar pláticas al colegio, cada vez que puede.
No sólo ha sido fotógrafo de grandes proyectos en Hollywood, sino también ha ayudado a su familia.

Así, aceptó la invitación de su hermano Alejandro para hacer la fotografía en el cortometraje De Mesmer con amor o té para dos, que ganaría el Riel de Oro en Cannes y le produjo un documental sobre Cuauhtémoc Cárdenas, que lo mostraba en las elecciones de 2000.

Y sabe que el cine se hace en equipo, sin caer en  protagonismos.

“Fue una extraordinaria experiencia poder trabajar con el increíble Iñárritu”, escribió en el citado correo electrónico.

“Sin duda alguna es uno de los más grandes directores del cine contemporáneo y un gran amigo. Me da muchísimo gusto ver que la Academia reconoce su trabajo y el de su equipo de gentes de esta manera.

cvtp

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses