A diferencia de los más recientes años, cuando fueron de los últimos en abandonar el salón de negociaciones en busca de una operación in extremis, los representantes del Guadalajara fueron de los primeros en irse. Los blancos de Matías Almeyda eran Hirving Lozano (Pachuca) y Javier Aquino (Tigres), pero no hubo oportunidad de negociarlos.

“No es un tema de precio del jugador. Los dos equipos tienen suficiente dinero y son instituciones muy serias”, compartió José Luis Higuera, CEO del Grupo Omnilife-Chivas. “Su respuesta final fue no y ahí queda”. El directivo reveló estar convencido de que el plantel que se coronó hace semana y media vuelva a pelear por el título.

Google News

Noticias según tus intereses