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Desde 2002, Javier Aguirre vive fuera de México, salvo el periodo de 2009 a 2010, que fue cuando regresó para dirigir otra vez al Tri.
Pero no está ajeno a lo que ocurre en el país. “No es agradable que pongan a México como uno de los países más violentos o corruptos del mundo”, dice el Vasco.
“Me parece vergonzoso. Ahora [en el momento de la entrevista], estoy en Sri Lanka, una isla al lado de la India, y cuando saben que vengo de México, lo asocian con noticias negativas”.
Los propios jugadores que Aguirre tenía en el Al Wahda de Arabia Saudita, “me decían que querían ir a Cancún [Quintana Roo] de vacaciones, pero que tenían miedo por lo que ven en las noticias... Ahí ¿qué les dices? Pues que se come muy bien, que la gente es encantadora, pero claro, no puedes ir por la calle presumiento un rolex”.
Mas no se queda en el pesimismo. “Estoy convencido de que tarde o temprano, los mexicanos vamos a pasar por encima de todo esto. La gente es entrañable, encantadora, ojalá pronto me lleguen más buenas noticias que malas, ojalá”.
Mas no es esa la razón por la cual Javier Aguirre se niega a regresar a México, ahora que se desvinculó del futbol de Arabia. “Hay etapas que ya están cerradas. No tengo pensado volver a México, por lo menos en dos o tres años, cuando termine mi carrera como técnico. Ya son 16 años fuera, extraño a mi gente, pero dos o tres años más estaré exprimiendo mi carerra como entrenador”.
Tiene ofertas, “podría irme a China o a la MLS ahora mismo, pero voy a valorar si me aguanto hasta enero para volver, mientras a disfrutar a mi esposa [Silvia] a mis hijos, que ahora los tengo muy lejos”.
