Monterrey.— Lo peor no es ocupar el sótano en la tabla de cocientes o sumar 180 minutos sin gol en el Apertura 2015 (397 si se toma en cuenta el torneo anterior). Lo verdaderamente complicado para el Guadalajara es visitar al plantel más poderoso de la Liga MX, el cual está herido.

Esta tarde, las Chivas visitan a los Tigres con la necesidad de sumar unidades a como dé lugar. El problema es que a los dirigidos por Ricardo Ferretti todavía les duele el revés en la final de la Copa Libertadores, ante el River Plate (0-3). Quieren revancha.

Por lo que el ‘Tuca’ planea utilizar a buena parte de su alineación estelar, pese a que una tormenta eléctrica los tuvo varados en Buenos Aires durante casi 17 horas.

“Como sea tenemos que ganar”, sentencia el defensa Arturo Rivas. “Lógicamente, me refiero a jugando bien. Es lo que nos ha dado resultado, tanto en Libertadores como en Liga”.

“[El adversario] es Chivas y hay que dejar un poco de lado la situación que viven ellos. Quiero ganar, mi equipo también y salir de estas dos derrotas que llevamos”.

Ambas se dieron con un plantel alternativo. En su afán por adjudicarse la corona de América, el director técnico brasileño reservó a sus titulares habituales para los choques con el Toluca y el Morelia. Cayó en los dos por la mínima diferencia.

Sin importar la situación, no tener unidades después de dos jornadas disputadas es preocupante para un plantel valuado en poco más de 50 millones de dólares.

“La Liga no la empezamos bien, [pero] es flexible en ese aspecto; puede empezarse mal y terminar bien”, recuerda la ‘Palmera’. “Si queremos lograr salir campeones, no debemos dejar ir más puntos”.

Meta que ha mutado en obligación a causa de la caída frente a los Millonarios. Es cierto que también jugarán la Liga de Campeones de la Concacaf durante este semestre, pero los Tigres están conscientes de que la inversión realizada debe ser reflejada con una vuelta olímpica en diciembre.

Imagen que hoy luce bastante ajena para el Rebaño Sagrado, cuyo linaje ha sido manchado debido a la penosa y asfixiante lucha por permenecer.

El zaguero central reconoce la importancia de los rojiblancos en el balompié nacional, mas advierte que los norteños no les tendrán clemencia, no con la filosa daga fabricada por el River Plate aún dentro de sus corazones.

“Lamentablemente da tristeza por lo que representa el equipo a nivel México, es un referente, pero ahorita estoy defendiendo a Tigres”, recuerda Rivas. “Independientemente de su situación, quiero salir de este bachecito que tenemos en la Liga y hay que empezar mañana [hoy]”.

“Necesitamos de una victoria, nosotros y la afición”.

Están dolidos por la goleada sufrida sobre el campo del estadio Monumental, sus corazones todavía se exprimen, y la única forma de empezar a sanar es propinar otro revés a un coloso que ya siente el intenso calor generado por las llamas del averno.

“No está del todo bien [el grupo], porque nos dolió bastante esta derrota”, admite “[Ha sido] una de las finales que —en lo personal— me ha dolido mucho por todo lo que significaba, por tanta ilusión que teníamos, pero esto sigue, no es cortarnos las venas y quedarnos en la posición de tristeza”.

“Tenemos una revancha en el torneo de Liga y queremos aprovecharla”.

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