Un científico del Laboratorio de Investigación en Biotecnología Acuícola del Instituto Tecnológico de Boca del Río, Veracruz, desarrolla un proyecto enfocado en la biorremediación de pesticidas mediante el uso de microalgas como herramienta biológica.

En una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el doctor Ignacio Alejandro Pérez Legaspi, explicó que el análisis se realizará con el monitoreo del comportamiento de las algas cuando se sujetan a contaminantes.

"La intención del uso de estos organismos es ocuparlos como indicadores en la calidad del agua, es decir, monitorear la calidad de esta, a través de ellos. Estamos analizando la posibilidad de aprovecharlos como removedores de contaminantes en el agua", dijo Pérez Legaspi.

El científico añadió que estas microalgas se implementan en pruebas de toxicidad, con la finalidad de analizar su respuesta ante la presencia de sustancias tóxicas.

Pérez Legaspi dijo que existen algunos estudios donde las microalgas se usan como parte de tratamiento de aguas residuales en lagunas, donde son incorporadas para remover contaminantes.

"Estamos trabajando con estas microalgas que pudieran utilizarse como organismos remediadores de algún contaminante en aguas marinas, y así poder contrarrestar el impacto ambiental que supone la presencia de sustancias tóxicas en el litoral mexicano", comento.

Mencionó que en diversos estudios en el pasado detectaron que estas microalgas pueden llegar a remover pesticidas clorales, como el lindano, el cual es un pesticida altamente tóxico y poco degradable, que se usa con mucha frecuencia en México.

"Las microalgas tienen la particularidad de incrementar su biomasa y, por ende, remover este contaminante del medio, incorporándolo a su célula, donde lo ha de aprovechar como fuente de carbono para crecer", señaló.

De acuerdo con el Conacyt, estos procedimientos no arremeten contra la vida del organismo, puesto que, como lo indicó el investigador, dichas microalgas no son explotadas de manera irracional, solo se obtiene un metabolito secundario y se aprovecha como precursor para obtener un beneficio.

El proyecto que encabeza el doctor Pérez Legaspi busca generar conocimiento novedoso y sustentable, para contribuir con el mejoramiento del monitoreo de la calidad ambiental del golfo de México.

"Es conveniente implementar organismos para evaluar la calidad del agua, que sean lo suficientemente sensibles para identificar si hay algún problema en ese medio”, dijo el investigador del Instituto Tecnológico de Boca del Río.

“De igual manera es primordial realizar monitoreos periódicos que puedan garantizar que tenemos agua limpia en la que podamos recrearnos y obtener nuestro alimento de manera confiable", afirmó.

kal

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