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Luego de dos meses consecutivos al alza, la percepción de las familias mexicanas sobre su situación económica y la del país retrocedió en julio, ante la posibilidad de una mayor inflación y menor empleo, revelaron cifras del Inegi y el Banco de México.

Al iniciar la segunda mitad del año, el Índice de Confianza del Consumidor mostró una disminución mensual de 1.9% con datos ajustados por estacionalidad.

La caída de la confianza del consumidor en julio fue resultado de la disminución en los cinco componentes básicos que lo integran, así como en los nuevos indicadores complementarios que lo acompañan, relacionados con una alza de los precios en los próximos meses, una baja en la posibilidad de conseguir un empleo y la menor probabilidad de comprar un auto o una casa en los próximos dos años, entre otros.

En un inicio, la recuperación económica de Estados Unidos se colocó como una de los factores de mayor influencia en la confianza de los consumidores, los cuales mejoraron considerablemente la percepción económica de México.

Sin embargo, el menor dinamismo que ha presentado la economía estadounidense ha impactado paulatinamente el subíndice de percepción futura del país, lo que lo llevó a registrar una caída, comentó Mónica Díaz, analista económica de Banco Ve por Más.

En el séptimo mes del año el componente referente a la opinión sobre la situación económica de los integrantes del hogar en el momento actual frente a la que tenían hace 12 meses mostró un descenso de 0.4% con relación al nivel de junio pasado, con base en cifras corregidas por las variaciones estacionales.

Por su parte, el rubro que mide la expectativa sobre la situación económica de los miembros del hogar dentro de 12 meses, respecto a la que registran en el momento actual, presentó una caída mensual de 2.4%.

El componente que evalúa la percepción de los consumidores acerca de la situación económica del país hoy en día comparada con la que prevaleció hace 12 meses retrocedió 5.87% a tasa mensual.

La variable que capta las expectativas sobre la condición económica del país esperada dentro de un año respecto a la situación actual disminuyó 4.3% con relación al mes anterior.

Por último, el indicador sobre las posibilidades en el momento actual por parte de los integrantes del hogar, comparadas con las de hace un año, para efectuar compras de bienes durables, tales como muebles, televisor, lavadora y otros aparatos electrodomésticos mostró un descenso mensual de 4.13%.

Desde el mes pasado la Encuesta Nacional de Confianza del Consumidor presenta indicadores complementarios.

Uno de los que reportó mayores retroceso durante julio, con respecto al mes anterior, fue el relacionado con la perspectiva sobre el comportamiento de los precios en los siguientes 12 meses comparado con el año anterior, el cual cayó 6.76%, es decir, se prevé una mayor alza de precios.

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