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El talón de Aquiles de la industria petrolera mexicana sigue siendo la caída de la producción de petróleo crudo y gas natural.

Durante el cuarto año de la presente administración, Petróleos Mexicanos (Pemex) dejó de producir 105 mil barriles diarios de aceite en promedio, lo que representa una reducción de 4.6% en comparación con los niveles de extracción de un año antes.

De acuerdo con información de las secretarías de Hacienda y Crédito Público, Energía, así como de Pemex, este gobierno comenzó el cuarto año (agosto de 2015) extrayendo de los yacimientos petroleros ubicados en mar y tierra un promedio diario de 2 millones 254 mil barriles.

La información operativa preliminar de la empresa petrolera revela que al 21 de agosto de 2016, los niveles de producción se encuentran en 2 millones 149 mil barriles por día.

En octubre de 1980, según la Memoria de Labores de Pemex de ese año, se obtuvo una producción máxima de 2 millones 182 mil barriles diarios. Esto significa que México está produciendo los mismos volúmenes de aceite que hace 36 años.

En materia de gas natural, el problema es mucho mayor, puesto que la producción se derrumbó 10% en el cuarto año de esta administración, lo que significa que nuestro país dejo de extraer 634 millones de pies cúbicos diarios en promedio de este hidrocarburo, un volumen equivalente a la mitad de lo que consume anualmente toda industria o el sector residencial, según se desprende de la Prospectiva de Gas Natural y Gas LP 2015-2029 que elabora la Secretaría de Energía.

En agosto del año pasado, Pemex obtuvo de los yacimientos gasíferos del país 6 mil 365 millones de pies cúbicos diarios (incluyendo nitrógeno que viene asociado a la extracción y que constituye un componente no deseado).

Al 21 de agosto de 2016, la producción promedio del carburante alcanza 5 mil 731 millones de pies cúbicos, un volumen que no se tenía desde enero de 2007, cuando se obtuvo 5 mil 735 millones de pies cúbicos.

De hecho, el derrumbe de la producción de gas se está dando durante un periodo mucho más corto que en el caso del petróleo.

En diciembre de 2008, México registró el nivel máximo de extracción de este carburante, estimado en la Base de Datos Institucional de Pemex en 7 mil 358 millones de pies cúbicos diarios, lo que significa que el país habría dejado de producir mil 627 millones de pies cúbicos en siete años, un volumen equivalente a tres veces lo que demandan las 45 centrales de generación de electricidad operadas por privados.

Declinación natural. Pemex atribuye los resultados operativos en materia de producción de petróleo en el cuarto año de esta administración a la declinación natural de campos y al incremento del flujo fraccional de agua en los yacimientos altamente fracturados del activo Cantarell, de la Región Marina Noreste.

En el caso del gas, a la declinación natural en la producción de los activos Veracruz y Burgos, de la Región Norte y la administración de pozos con alta relación gas-aceite del campo Akal del activo Cantarell, así como por el incidente en el área de compresión de la plataforma Abkatún-A en febrero de 2016, el cual obligó al diferimiento de producción en campos.

Caída en inversión. Otro de los factores que contribuyeron a una menor producción de hidrocarburos es el nivel de inversión destinado a este fin.

El ejercicio pasado (septiembre de 2014 a junio de 2015), según el III Informe de Gobierno, Pemex ejerció 322 mil 977.8 millones de pesos por concepto de inversión en flujo de efectivo, de los cuales, 199 mil 731.7 millones de pesos se erogaron entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2015, cifra 7.8% mayor en términos reales a la realizada en el mismo periodo del año anterior, a pesar del ajuste al presupuesto asignado a la empresa productiva del Estado, por los cambios en el precio internacional del crudo.

La filial encargada de buscar y extraer hidrocarburos en mar y tierra, Pemex-Exploración y Producción, ejerció 85.9% de la inversión total en los primeros seis meses de ese año (171 mil 569 millones de pesos), “para mantener la producción de aceite entre 2.3 y 2.7 millones de barriles diarios y la de gas natural entre 5 mil y 6 mil millones de pies cúbicos diarios”.

Durante los primeros seis meses de 2016, la empresa productiva de Estado ejerció 154 mil millones de pesos, lo que representó 75.3% de la inversión programada estimada en 204.4 mil millones para todo el año, lo que obligó a diferir algunos proyectos que terminaron por afectar los niveles de producción, de acuerdo con reportes de la Secretaría de Hacienda.

La petrolera resintió un ajuste a su presupuesto a principios de año de 100 mil millones de pesos, por cambios en el precio internacional del crudo.

Esta vez, Pemex Exploración y Producción ejerció 137.1 mil millones en la primera mitad del año, una cifra inferior en 34 mil 469 millones de pesos a la del primer semestre de 2015.

De esta forma, tanto la declinación natural de los campos petroleros, que en su mayoría están en etapa avanzada de madurez, como los recortes presupuestales, tienen a la industria petrolera nacional en niveles operativos similares a los de hace tres décadas.

Con todo, la caída de la producción de petróleo en estos últimos cuatro años es de 15.8%, lo que significa que México ha dejado de producir 406 mil barriles diarios en promedio, volumen equivalente a tres cuartas partes de lo que actualmente se exporta a Estados Unidos (550 mil barriles diarios).

En materia de gas, el país ha dejado de producir alrededor de 745 millones de pies cúbicos diarios entre 2012 y 2016, con lo cual se puede abastecer únicamente a la mitad del parque industrial nacional.

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