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El Aeropuerto de Atlangatepec, que se localiza en Tlaxcala y hasta ahora tuvo vocación militar, será de los primeros en prestar servicio mixto, es decir que seguirá funcionando como base aérea militar, pero también con actividades de aviación civil.

De acuerdo con información de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), será necesario realizar una inversión de 95.6 millones de pesos para resolver los actuales problemas que enfrenta la terminal aérea.

Así, la Estación Aérea Militar No.9, como se le conoce, pasará a forma parte de la Red de Aeropuertos que opera Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) a partir de este año, para lo cual será necesario remodelarlo con el propósito de que cumpla con la normatividad de aviación civil (CO DA-04/07 R1 emitida por la Dirección General de Aeronáutica Civil de la SCT).

El diagnóstico realizado por las autoridades aeronáuticas del país a este aeropuerto revela que “la infraestructura del aeródromo de la Estación Aérea Militar No. 9 (EAM-9) se encuentran en mal estado e incluso ha rebasado su vida útil, debido a la falta de mantenimiento, lo que no cumple con los requisitos para llevar a cabo operaciones aeronáuticas civiles”.

El proyecto de inversión contempla rehabilitar el área de aterrizaje-despegue, calles de rodaje y rehabilitación de plataforma, así como el edificio terminal e instalaciones perimetrales, las cuales están “en mal estado y no permiten funcionalidad del aeródromo”.

De no realizarse el mantenimiento mayor, el aeropuerto “no podrá desarrollar alguna operación aeronáutica civil”, explica el documento al que tuvo acceso EL UNIVERSAL.

El documento cita, por ejemplo, que la pista se encuentra construida en pavimento de asfalto (2 mil 469 metros de longitud y 31.5 metros de ancho). Dicho pavimento actualmente muestra grietas tanto longitudinales como transversales, desprendimiento de material pétreo y escurrimientos de agua.

Además, la pista cuenta con dos sistemas visuales de indicadores de pendientes de aproximación cuyos ductos están destrozados y sin continuidad; los gabinetes están desmantelados y desnivelados y no tienen lámparas.

Respecto de las dos calles de rodaje, presentan grietas longitudinales y transversales y carece también de un sistema de luces de borde de las calles, y dificulta operaciones nocturnas.

El edificio terminal que abarca una superficie de 375 metros cuadrados está adaptado para albergar oficinas, recepción y sala de junta de la Estación Militar No.9, por lo que no dispone de áreas funcionales de terminal aérea como mostradores, puntos de inspección, sala de espera, entre otras.

El diseño del aeropuerto, según el proyecto de inversión, permite que se puedan realizar en condiciones de seguridad 13 operaciones aeronáuticas por hora, pero para ello es necesario que sus distintos componentes presente un estado de funcionamiento y conservación adecuado.

La inversión incluiría la rehabilitación del área de aterrizaje-despegue, de calles de rodaje, de plataforma y sustitución del cercado perimetral y habilitación del edificio terminal.

El aeropuerto están a 18 kilómetros por la carretera federal Tlaxco-Chignahuapan y la desviación a Atlangatepec, desde la ciudad de Apizaco en Tlaxcala, fue construido en 1982 y desde 1997 alberga la Base Aérea Militar No. 19.

Dentro de las instalaciones del aeródromo hay un área destinada a viveros del personal de la Base Aérea, la cual tiene un fin recreacional y se distribuye en cuatro cuerpos de 200 metros cuadrados cubiertos con plástico.

Dispone de instalaciones de alojamiento para el personal militar y sus familias, la cual está en un edificio de 4 pisos con 16 departamentos así como una zona de estacionamiento.

Dado que a partir de este año dicho aeropuerto formarán parte de la Red de Aeropuertos de ASA, será necesario que sus instalaciones se encuentren en óptimas condiciones.

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