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A muchos conductores defeños se les pusieron los pelos de punta en la mañana del jueves pasado. La Gaceta Oficial de la Ciudad de México publicó un día antes los lineamientos estratégicos del Programa Integral de Seguridad Vial 2016-2018. El documento, largamente esperado y discutido con la sociedad civil (consecuencia última de la Ley de movilidad y del Reglamento de tránsito), estipulaba, se reportó, la aplicación obligatoria de una ‘revista’ técnica a cada auto particular en la Ciudad de México. ¿Cuándo se aplicaría? Durante cada Verificación semestral por emisión de gases. La imagen de una revisión más, de un requisito extra, en los minutos estresantes que millones invertimos en un Verificentro, se convirtió en material de pesadillas. Si tu auto tenía desgaste excesivo en las llantas, balatas sucias, amortiguadores gastados, ausencia de retrovisores o algún otro rasgo mecánico que disminuyera la seguridad de circulación, podría caer en un hoyo burocrático. Esa era la percepción. Los conductores responsables y conscientes, nos preocuparíamos menos.
Una lectura más precisa. “No se describieron las cosas en su justa dimensión, me parece. No está bien enfocado”, afirma en entrevista Laura Ballesteros, subsecretaria de planeación de la Secretaría de Movilidad. “Hay una lógica de corto, mediano y largo plazo. La inspección técnica (que no ‘revista’) está inscrita en el mediano plazo. O sea, para 2019-2020”, detalla la funcionaria. Sucederá (si sucede), después de la administración de Miguel Ángel Mancera. Lo que el Programa dibuja es una fase de planeación, no de ejecución. Lo lógico, según Ballesteros, es que una inspección así se realice en locales con las características de los Verificentros. “La inspección tiene carácter de recomendación, no de restricción”, añade la subdirectora. Es una forma de hacerle ver al conductor los riesgos que toma al tener su auto en mal estado. Eso no quiere decir que deje de circular en automático si no ‘pasa’ la inspección.
Ese carácter no rebaja la importancia del programa. La Organización Mundial de la Salud, en su iniciativa Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020, traza cinco pilares de acción (los accidentes de tránsito son uno de los problemas de salud pública más graves del mundo). Uno de esos pilares, precisamente, pone el acento en la importancia del buen estado del vehículo.
Así que no debes preocuparte de más. Ojo: hay medidas a corto plazo que sí debes tomar en cuenta. Son 10 acciones de alto impacto, como define Ballesteros, para bajar la incidencia de accidentes. Una de ellas es la aplicación de exámenes de conocimientos a los que van a sacar por primera vez su licencia de manejo.
