ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
Un edificio inspirado en un antiguo barco vikingo que ancló en el centro de la ciudad, con una puerta de cristal del tamaño de un hangar y el techo transparente, es el estadio donde esta tarde se realizará el Super Bowl.
Cuando los Vikings, en 2012, tuvieron un presupuesto de mil millones de dólares; la maqueta de la firma HKS —responsable del Lucas Oil (Colts), AT&T (Cowboys)—, fue la que sedujo a la familia Wilf, dueña del equipo.
Su diseño se caracteriza por formas geométricas y un uso eficiente del espacio. El techo está hecho con una película de plástico, que ayuda a mantener una temperatura confortable. Las puertas son las más grandes del mundo, con casi 30 metros de alto y 16 de ancho.
Tiene capacidad para 66 mil 200 personas. El techo inclinado ayuda a derretir la nieve, como aprendieron de las construcciones nórdicas. Las tribunas son las que más cerca están del campo (45 metros), dentro de todos los estadios de la NFL.