Estas composiciones rítmicas o calaveritas literarias, son clásicas entre los mexicanos en la época de día de muertos. En la etapa colonial fueron prohibidas e incluso calificadas como “irrespetuosas”. Son versos que describen a personaje quienes, muchas veces, entablan diálogos cómicos con la misma muerte

Honrar la tradición y recordar a los difuntos, pero burlarse también de la propia muerte. Varios personajes aceptaron escribir para EL UNIVERSAL su propia composición y otras salieron de nuestro ronco pecho.