Una mujer comenzó a recibir mensajes a través de WhatsApp en los que le aseguraron que tenía que entregar, de la noche a la mañana, 300 mil pesos al Cártel de Guadalajara, es decir, al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), o en todo caso atentarían contra su hermano y su cuñada.
Le enviaron fotografías de ambos, así como del lugar en donde la víctima trabaja. Según la narración de hechos, la mujer comenzó a tener miedo, a perder el sueño, pues le dijeron que no le darían la cuenta bancaria hasta que juntara toda la cantidad.
A nivel nacional, este delito se vuelve común, pues los datos del organismo refieren que de enero a septiembre han recibido 15 mil 600 llamadas a los números de atención provenientes de todo el país. Sin embargo, 75% de los reportes ciudadanos son de la capital, y 12% proviene del Estado de México.
El 96% de las extorsiones en la capital no se concreta, sólo un 4%, explicó el presidente del consejo, Salvador Guerrero Chiprés.
Las tres alcaldías que concentran estos delitos son Iztapalapa, con 13%; Gustavo A. Madero, con 11%, y Cuauhtémoc, con 8.3%.
15,600 LLAMADAS de todo el país han recibido los números de atención del consejo.
Éstas son las demarcaciones más altas, pero le sigue Coyoacán, con 7.1%; Tlalpan, con 6.8%; Benito Juárez, con 6.6%; Álvaro Obregón, con 6.5, y Miguel Hidalgo, con 5.2%.
“Supuestos integrantes de organizaciones delictivas [hacen llamadas]; está el secuestro virtual, la amenaza de secuestro, el gota a gota, sextorsión, cobro de derecho de piso, supuestas llamadas al Reclusorio, esos son algunos de los modus operandi”, comentó Guerrero Chiprés.
Dijo que la reducción en este delito se debe a los trabajos de la policía capitalina y de la fiscalía, de atacar las causas y los generadores de violencia en calles de la Ciudad.
Recordó que la extorsión llega a concretarse cuando los delincuentes logran influir en el estado anímico, generando miedo entre las víctimas, por lo que pidió que los casos sean reportados a los números del Consejo Ciudadano, en donde se podrá constatar si el número de donde proviene la llamada cuenta con reportes.
Dentro de las modalidades para extorsionar no sólo está hacerse pasar por integrantes de grupos delictivos, sino robar información personal o imágenes con contenido sexual con la que buscan amedrentar a la víctima.
Un ejemplo de ello es la serie de llamadas que recibió una mujer, a quien le pedían fotografiarse desnuda y posteriormente enviar ese material, o en todo caso compartirían una serie de fotos a toda su familia. La mujer contó que esas fotografías las había enviado a su esposo, con el que vive, y que sospechan que habían hackeado sus redes sociales, pues incluso le cambiaron la contraseña.
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