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Naucalpan, Méx.—Cerca de 300 policías municipales protestaron frente al palacio municipal por falta de pago de su salario que esta vez se atrasó seis días, aseguraron guardias locales. A su vez, autoridades municipales atribuyeron este atraso a la reducción de 30 millones de pesos de participaciones estatales.

“¡Si cumplimos, que nos cumplan, queremos nuestro salario y un salario digno, equipo, uniformes, pago de despensa y seguro de vida!”, exigieron en mantas y carteles frente a la presidencia municipal y en una marcha por calles de los fraccionamientos El Mirador y Las Américas, que rodean la alcaldía.

En tanto, dirigentes vecinales y colonos de San Agustín, Las Américas, Rincón Verde, Colón Echegaray, Santa Cruz Acatlán y Altamira, entre otros, que apoyan a los policías y empleados municipales, colocaron carteles de embargo en las puertas de la alcaldía.

“Embargado por no pagar en tiempo y forma”, fue el lema que colocaron en enormes carteles integrantes del Movimiento Antibache Naucalpan Organizado (MANO), cuyo fundador, José Antonio Arzate, aseguró que no cobraría el salario de este lunes 5 de noviembre, como empleado de la comisaría municipal, pues decidió salir a protestar.

Policías y dirigentes vecinales pidieron con megáfonos la presencia del alcalde panista Víctor Gálvez Astorga, al que acusaron de irse de “puente largo” a Mazatlán, cuando miles de trabajadores naucalpenses no cobraron su salario quincenal.

A cinco días de la quincena, miles de trabajadores municipales, entre ellos 2 mil 429 policías, aún no cobraban su quincena, salario que empezó a ser depositado poco antes del mediodía, lo que llevó a los guardias a suspender la protesta que mantuvo la presidencia municipal cerrada hasta casi las 13 horas.

El salario de los policías fue cubierto durante el lunes, no así el de empleados de confianza, que en pasillos y oficinas externaban su deseo de sumarse a la protesta.

El atraso en el pago de salarios, afirmó Agustín Belgodere Hernández, titular de Comunicación Social de Naucalpan, se debe a una reducción de 30 millones de pesos en participaciones estatales, que repercute en el pago de la nómina y de algunas prestaciones —como despensas— “pese a la política de austeridad real”, que aplica este gobierno.

Naucalpan invierte un promedio de 90 millones de pesos mensualmente en el pago de la nómina, por lo que la reducción de las participaciones y la disminución del pago de impuestos como el predial, impactan en este rubro.

“Recibimos una administración en quiebra con 2 mil 400 millones de pesos de deuda, por lo que se han realizado recorte de gastos dolorosos, como el de la gasolina, no obstante se mantienen servicios vitales”, dijo.

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