estados@eluniversal.com.mx

Chilpancingo.— En los últimos días las protestas, bloqueos y toma de dependencias oficiales en la entidad se están convirtiendo en algo rutinario. Si no es la región Norte, es en la Montaña, Tierra Caliente, alguna de las dos costas, en la capital o Acapulco, donde los campesinos no paran de manifestarse por el retraso en la entrega de fertilizante.

La adjudicación del insumo debía iniciar hace un mes, cuando comienza el ciclo agrícola. Las lluvias han comenzado en Guerrero y el fertilizante apenas se ha repartido a 14% de los campesinos, según el cálculo que hizo el gobierno del estado.

El secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Guerrero, Juan José Castro Justo, alertó sobre el riesgo de la autosuficiencia alimentaria por el retraso. “La mayoría de la producción del maíz es para autoconsumo de los pueblos”, advirtió el funcionario.

Para las comunidades rurales y sobre todo para los pueblos originarios es decir, unas 529 mil 780 personas, de acuerdo con registros oficiales, las cosechas de maíz son indispensables para su alimentación: la tortilla es su producto base.

Según el gobierno estatal, en Guerrero se siembran 453 mil 771 hectáreas; de cada una los campesinos cosechan 2.88 toneladas de maíz.

El director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, advirtió que si los campesinos no reciben el fertilizante, los pobladores de la Montaña entrarán en una crisis alimentaria por la baja producción de granos básicos y esto provocará incremento en la migración.

“Si de por sí la gente es vulnerable, con el retraso en la entrega, la gente prefiere salir de sus pueblos, le apuesta más al ingreso económico como jornalero que como productor en sus comunidades”, señaló.

El conflicto. La mala planeación está provocando el retraso en la entrega del fertilizante, dijo el gobernador Héctor Astudillo Flores.

“Esto se ha visto reflejado en la ausencia de un padrón y en la falta de vales suficientes y la incipiente entrega del propio insumo. En consecuencia, la protesta social se ha venido incrementando por todo el territorio guerrerense”, criticó.

Astudillo Flores también acusó al gobierno federal de no cumplir los lineamiento de operación para depurar el padrón de beneficiarios y esto, dijo, ha provoca incertidumbre por no saber quienes serán los productores beneficiados.

Pero no sólo eso, el mandatario denunció la mala operación del programa y dio cifras: “Hasta el 17 de junio se han concentrado en bodegas 57 mil 225 toneladas del insumo agrícola, menos de 50% de lo que se requiere. Al día de hoy, se tienen licitadas sólo 101 mil 605 toneladas, cantidad insuficiente para atender a los productores y al número de hectáreas que necesitan apoyarse conforme a los lineamientos del programa”.

El delegado único del gobierno federal, Pablo Amilcar Sandoval Ballesteros, tiene otra versión del conflicto. Parte del retraso se debe a las protestas, bloqueos y tomas de oficinas, pues, según el funcionario, no están permitiendo que llegue el insumo hasta las bodegas desde donde se va distribuir.

Ha denunciado que muchas de las protestas son alentadas por los partidos de oposición. Afirmó que el fertilizante está garantizado; sin embargo, reconoció que están al límite para su entrega, pues la fecha fatal son los primeros días de julio.

Explicó que el aplazamiento se debe a que parte de los insumos no ha llegado en su totalidad al estado; indicó que en bodegas sólo tiene dos de los cuatro productos: sulfato y el fosfato y faltan por llegar el biofertilizante y las semillas mejoradas.

El funcionario comentó que están esperando la llegada de los cuatro productos para comenzar la entrega y evitar que los campesinos den más de una vuelta para recogerlo.

Señaló que este año se registraron 401 mil solicitudes para ser beneficiarios. Sin embargo, de acuerdo con el diagnóstico de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), se está pidiendo fertilizante para el doble de las hectáreas cultivables que hay en Guerrero.

Explicó que están solicitando fertilizante para sembrar en más de 800 mil hectáreas cuando el gobierno federal sólo ha detectado 450 mil hectáreas cultivables.

El fertilizante. El fertilizante industrializado en Guerrero se reparte desde 1994. Este año ha sido, tal vez, el más angustiante. En casi la mitad de los municipios los campesinos ha salido a las calles a protestar. Y cada vez van subiendo de tono.

En la Montaña, los campesinos retuvieron cuatro días al alcalde Joaquín Luciano Rosendo y al delegado regional del gobierno federal, Julio Lázaro Bazán. Con ellos estuvieron también tres regidores.

En Tierra Caliente pasó lo mismo: campesinos retuvieron más de 24 horas al delegado regional del gobierno federal, Andrés Nieto Cuevas. También han retenido a militares.

Desde hace casi un mes hay bloqueos en carreteras y en los Centros de Apoyo al Desarrollo Rural (Cader) que dependen de la Sader.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses