La anorexia afecta a millones de personas en todo el mundo, el motivo por el cual se extiende este trastorno alimenticio, en muchas ocasiones, culmina en un desenlace fatídico, al ser la responsable de una mortalidad del 0,56% al año,

Los estereotipos que erigen los roles de género nos han hecho creer que este padecimiento afecta principalmente a mujeres y relegan la situación de los hombres , puesto que en muchos contextos es considerado un tabú, sin detenerse en comprender los cambios que ha sufrido la sociedad en cuanto a la identidad de género.

La manorexia , neologismo conformado por los términos griegos an (privativo) y orexis (deseo o apetito), fue acuñado para referirse a la anorexia masculina, aunque es un término no reconocido oficialmente. Se trata de un trastorno mental y de comportamiento, el cual, a través de un conjunto de síntomas, signos y conductas de riesgo puede presentarse con distintos niveles de severidad.

El dolente de anorexia suele someterse a una rigurosa dieta autoimpuesta que provoca un peso corporal anormalmente bajo , ante el temor desmedido a aumentar de peso , así como una percepción distorsionada de sí mismo . Además se manifiestan otros padecimientos derivados de dicha practica, como constipación e hiperactividad, desnutrición, afecciones cardiacas e incluso la muerte.

Este problema que cada vez se presenta con mayor asiduidad afecta al paciente mediante una multiplicidad de factores, tales como la vulnerabilidad personal y la presión social para cumplir ciertos cánones de belleza física.

Otra situación que genera vulnerabilidad a este trastorno psicológico es la difusión, a través de los medios masivos, de alimentos con alto contenido calórico, al mismo tiempo que transmiten la delgadez como símbolo de estética y éxito dentro de la escena social, lo que fomenta una situación de inestabilidad en la toma de decisiones, según indica Aris Yosifides en su libro "Bulimia y anorexia. Clínica de los trastornos alimentarios".

Las dificultades de apropiarse de su autonomía y el autocontrol de la ingesta de alimentos de alto contenido calórico, como forma de contraponerse al descontrol que viven en el ámbito de la vida afectiva, son algunos de los factores tomados en cuenta dentro de las causas psicológicas que facilitan que personas adquieran manorexia.

Las consecuencias de hábitos de mala alimentación pueden alterar el funcionamiento cardiovascular y la motilidad intestinal ; la disminución en la masa ósea y la pérdida de cabello ; así como el estreñimiento crónico , problemas dentales , anemia y la presencia de futuros desórdenes del sistema inmunitario ; sin olvidar las repercusiones psicológicas que afectan en la autoestima y en el estado de animo del paciente al aislarse socialmente.

El combate contra la manorexia debe abordarse desde distintos frentes. Al tratarse nutricionalmente deben buscarse los alimentos y nutrientes pertinentes para restablecer los hábitos del doliente. Por otro lado, la rehabilitación psicológica debe mostrar vivencias presentes que, a su vez, estén relacionadas con experiencias pasadas para comprender el estado en que se encuentra el paciente.

El pronóstico para rehabilitarse de la anorexia masculia varía según las necesidades especificas. En un tercio de los afectados persistirá parte de la sintomatología y en un 5% de casos existe la posibilidad de que la enfermedad se cronifique, según citan publicaciones extranjeras.

Los casos de anorexia en hombres suelen detectarse en una etapa avanzada, lo que dificulta el proceso de recuperación. En algunos casos se presentan secuelas permanentes debido al avance del padecimiento, por lo que su identificación temprana, que representa un quiebre de estereotipos culturales, resulta imprescindible para atender el trastorno.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses