Tucson, Arizona.— Un juez federal en Arizona, Estados Unidos, dictó cargos de asesinato en segundo grado contra el agente de la Patrulla Fronteriza Lonnie Swartz por la muerte de José Antonio Elena, un joven de 16 años quien recibió más de 10 disparos cerca del muro fronterizo en Nogales, Sonora, hace tres años.

En la comparecencia, el acusado, que llegó acompañado de sus abogados y el presidente del Sindicato de la Patrulla Fronteriza en Tucson, Art del Cueto, permaneció en silencio y se limitó a contestar si entendía los cargos que se le imputaban, a lo cual respondió que sí, y si tenía armas en su casa, a lo que declaró que no.

El juez ordenó a Swartz no salir de los estados de Nevada y Arizona mientras se lleva a cabo el proceso jurídico.

“Si viola estas condiciones podrá tener hasta cinco años más de cárcel” , le dijo el juez.

Aracely Rodríguez, madre de la víctima, quien ingresó por primera vez a Estados Unidos con un permiso de 12 horas que obtuvo para asistir a la audiencia, comentó que a tres años de la trágica muerte que ocurrió la noche del 10 de octubre de 2012 el dolor que siente su corazón sigue y seguirá intacto. EFE

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