La Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús lamentó la muerte del padre Miguel Machorro, quien falleció semanas después de ser atacado en plena misa en la Catedral el pasado 15 de mayo.
En un comunicado, la orden religiosa condenó además la violencia en cualquiera de sus formas y recordó que miles de personas han muerto por este hecho en los últimos años.
“Los jesuitas hacemos un llamado a las autoridades y a la sociedad en general para que juntos redoblemos nuestros esfuerzos en busca de la paz social en México”, expuso.
La Compañía recordó que el papa Francisco, jesuita, propuso la no violencia como “un típico ejemplo de valor universal que se encuentra en el Evangelio de Cristo”, que es el camino que debe convertirse en el estilo de vida a seguir “en el presente y el futuro” para lograr la paz.
Nos unimos a la pena que embarga a la familia de nuestro hermano sacerdote y a la arquidiócesis. Oramos para que el Padre lo reciba en su gloria, puntualizó.