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Padres de familia de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa exigieron una reunión con el presidente Enrique Peña Nieto antes del 10 de septiembre para que se comprometa a cumplir con las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre el caso Iguala.
También pidieron que el grupo de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos permanezca de manera indefinida hasta que se dé con el paradero de los estudiantes.
En conferencia de prensa en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro, los padres demandaron castigar a Jesús Murillo Karam, quien, como procurador General de la República, informó que los estudiantes fueron incinerados en el basurero de Cocula, lo que fue refutado por el grupo de expertos.
“Hay pruebas científicas que ahora nos dicen que nuestros hijos no murieron en ese basurero como nos lo quiso hacer creer Murillo Karam con su verdad histórica que resultó ser una mentira histórica”, afirmó Felipe de la Cruz, vocero de los padres.
También pidió que sean investigados Tomás Zerón de Lucio, titular de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, y Enrique Galindo Ceballos, titular de la Policía Federal, así como otros funcionarios federales, estatales y municipales, quienes han obstaculizado u omitido información sobre la desaparición de los jóvenes, y que llevaron a concluir que los normalistas fueron incinerados.
Felipe de la Cruz anunció que el próximo 23 de septiembre los familiares iniciarán un ayuno que concluirá el 25 de septiembre y que el 26 del mismo mes harán una marcha en la ciudad de México.
“Queremos hacer sentir la fuerza del pueblo y que sean castigados los culpables de la desaparición de nuestros hijos”. Por su parte, Vidulfo Rosales, abogado de los familiares, aseguró que una de las demandas es que se reabran las investigaciones para que se incluya al Ejército y a la Policía Federal.
Sobre el informe del grupo de expertos, el abogado lamentó la respuesta que dio la PGR. “Porque en lugar de hacer suyo estos peritajes, o en lugar de usarlos para sus investigaciones, ahora viene a decir que hará otro”. Los padres de los desaparecidos exigieron que el gobierno entregue con vida a los 43 normalistas porque científicamente quedó demostrado que no fueron quemados.