johana.robles@eluniversal.com.mx
Tras asegurar que el Partido de la Revolución Democrática en el Distrito Federal (PRD-DF) está “inmóvil” y no ha hecho control de daños tras la elección del pasado 7 de junio, la corriente Nueva Izquierda (NI) demandó la renovación del partido e incluso de la dirigencia capitalina.
El ex diputado federal, Julio César Moreno, que fue designado el coordinador de Nueva Izquierda en el Distrito Federal, aseguró que el actual dirigente, Raúl Flores, al ser también diputado local está más concentrado en los temas legislativos.
“Ante un partido que está prácticamente parado, sin discusión política, estamos exhortando que haya esa discusión política que, seguramente, para llegar a la conclusión de que urge renovar nuestra dirección”, expuso al preguntarle si era urgente renovar, en su opinión, la dirigencia capitalina.
Incluso, comentó que están exhortando a Raúl Flores a que asuma ese papel y convoque a un consejo estatal y que para esto ocurra Nueva Izquierda está dispuesto recabar las firmas necesarias a fin de que se concrete
“Llevamos varios meses, muchos meses, en dónde tenemos un partido en la ciudad inmóvil y la dirigencia estatal no ha mostrado indicios de realizar una acción de control de daños y mucho menos un análisis de la elección, en coordinación con el consejo político y sus dirigentes”, apuntó el ex delegado en Venustiano Carranza.
Moreno Rivera expresó que la fuerza de Nueva Izquierda los convierte en la primera minoría al tener cuatro de las seis delegaciones perredistas (Iztacalco, Venustiano Carranza, Coyoacán y Gustavo A. Madero).
En la conferencia de prensa estuvo acompañado de los dirigentes nacionales de Nueva Izquierda, Jesús Zambrano y Jesús Ortega, quienes advirtieron que se necesita una renovación del PRD en el DF para volver a ser la fuerza mayoritaria para 2018.
“El partido está obligado, quizá más que en ningún otro lado”, comentó Jesús Zambrano Grijalva.
Consultado al respecto, el presidente del PRD-DF, Raúl Flores García, comentó que respeta las críticas pero defendió su actuación al frente del partido y aseguró que sí ha trabajo en la defensa de sus compañeros después de la elecciones y rechazó que sea un partido que no trabaje, pues se están instalando los parlamentos ciudadanos en las delegaciones.
De igual forma dijo que su presidencia no es ilegal y que la renovación de ésta se dará, pero esa decisión debe tomarse por consenso, pues de esa misma forma es que fue electo.
Al respecto, Roberto López, de Vanguardia Progresista y representante del PRD ante el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), rechazó que el partido esté inmóvil y por el contrario, reviró que Nueva Izquierda también fue culpable de los descalabros que tuvieron en las pasadas elecciones.
Afirmó que sí se ha convocado a reuniones del Comité Ejecutivo Estatal, se han realizado reuniones con líderes y dijo que Raúl Flores García puede continuar en el cargo.
El líder de la corriente nacional Nueva Izquierda, Jesús Ortega Martínez, dijo que si bien se están buscando alianzas electorales con fuerzas políticas de izquierda, en el DF, recordó “somos contrincantes” y actuará como oposición en los gobiernos delegacionales como Cuauhtémoc.