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Para prevenir embarazos y enfermedades de transmisión sexual entre los adolescentes, el Gobierno de la Ciudad de México repartirá un millón de libros de Salud Sexual.
De acuerdo con autoridades locales, el número de gestaciones adolescentes registra una tendencia a la alza a nivel nacional. En la Ciudad de México la tasa de fecundidad entre mujeres de 15 a 19 años es la más baja de todo el país, con 52 por cada mil; mientras que una de cada 19 adolescentes resulta embarazada en la capital.
El secretario de Salud, Armando Ahued, informó que a través de El Médico en Tu Casa se atendieron 29 mil mujeres embarazadas con información y atención acerca de métodos anticonceptivos y planificación familiar.
Durante la tercera Sesión Ordinaria del Grupo para la Prevención de Embarazos en Adolescentes de la Ciudad de México se integró la estrategia interinstitucional para reducir este fenómeno, así como sensibilizar a servidores públicos acerca de su importancia y procurar una atención integral.
Como parte de esta estrategia, la Escuela de Administración Pública de la Ciudad de México impartirá el curso en línea Hablemos del embarazo en adolescentes… una conversación indispensable, que busca que los servidores públicos comprendan la situación del embarazo en niñas y adolescentes.
La secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, dijo que el objetivo es comprender este fenómeno, que requiere la no estigmatización y la corresponsabilidad de hombres y mujeres.
Señaló que algunas situaciones que enfrentan las adolescentes y pueden ocasionar un embarazo no deseado son la violencia sexual, dificultad para acceder a los servicios médicos, escasa información sobre sexualidad, deserción escolar, dificultades para obtener empleo y la desigualdad social.
Pese a ello, tienen derecho a formar un futuro y desarrollar sus capacidades. Recordó que ese fundamento se expresa en la Carta de Derechos de la Constitución capitalina.
“Nos parece de extrema preocupación que se cuestione el núcleo de una Carta Magna que ha reconocido la autodeterminación personal, la misma que se hace extensiva a las y los adolescentes bajo el concepto de autonomía progresiva en lo que concierne a los derechos sexuales y reproductivos”, enfatizó la funcionaria.