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Madrid.— Tras los días de trámites que han seguido a la muerte de María Villar Galaz se espera que las cenizas de la española lleguen a tiempo para el funeral anunciado para mañana.
Una fuente vinculada al consulado de España en México declaró ayer que los familiares se disponían a abandonar el país en el único vuelo del día para llegar en la mañana de hoy a España: “En torno a las nueve de la mañana [de ayer] han sido trasladados el viudo y el primo en un vehículo del consulado para ir al aeropuerto en un horario en el que previsiblemente van a viajar en Iberia a mediodía”.
El esposo, el ciudadano hispano-brasileño Cristiano Do Vale, y el primo, Gorka Villar, hijo de Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Futbol, tiene prevista su llegada hoy al aeropuerto de Bilbao, en el norte de España, tras una escala en Madrid. El Ministerio de Exteriores español no ha querido confirmar este extremo “por tratarse de un asunto privado sobre el que no hay autorización de la familia para hablar”.
Según la esquela publicada el viernes en El Correo, el principal diario vasco, el funeral de Villar se celebrará mañana lunes 26 en la localidad de Las Arenas (Bilbao).
María Villar, de 39 años, residía en México desde hacía tres años pero era natural de Getxo, una ciudad cercana a Bilbao. Su muerte ha causado un particular impacto en el municipio y se han multiplicado los mensajes de condolencia. El alcalde, Imanol Landa, expresó su “consternación” por el secuestro y muerte de la alta ejecutiva de IBM. Su tío, Ángel María Villar, es particularmente apreciado en la zona: fue una estrella en el equipo de fútbol de Getxo y en el Athletic de Bilbao.
El cadáver de María Villar fue hallado el 15 de septiembre en un canal de aguas negras en el municipio de Santiago Tianguistenco.
La vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ofreció toda la colaboración de Madrid en la investigación. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró que los dos agentes de policía españoles desplazados a México por el caso permanecerán en el país para “mantener la tensión de la investigación”.