Guillermo Padrés Elías, ex gobernador de Sonora, desestimó el citatorio de la Fiscalía Anticorrupción en Sonora (FAS) y no acudió a comparecer a las 13:00 horas para defenderse de los delitos de corrupción y enriquecimiento ilícito que se le imputan.
La mañana de hoy, a las 10:00 horas, tampoco asistió a un citatorio girado por la Procuraduría General de la República (PGR).
Decenas de representantes de los medios de comunicación se quedaron esperando hasta más de dos horas después de la hora de la diligencia judicial en espera de que llegara el ex mandatario o su representante legal.
A la Fiscalía también acudió Gisela Peraza Villa, ex trabajadora doméstica de la familia Padrés Dagnino, acusada por el robo de dinero y joyas en la casa de gobierno, delito que asegura no cometió y por el cual luego de ser torturada, cumplió una sentencia de cuatro años y dos meses de prisión. Tras un largo proceso judicial un juez la declaró inocente.
Peraza Villa cree que el ex gobernador tiene una estrategia para evadir a la justicia y salir librado de todos los cargos que se le imputan.
Dijo desconocer la causa de los citatorios a Guillermo Padrés, si es por el proceso que se le sigue por corrupción y enriquecimiento ilícito o por su demanda judicial, ya que su abogado Juan Antonio Ortega le dijo que acudiera, pero el representante legal no acudió a la PGR ni a la Fiscalía.