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Guadalajara.— La historia ha dado un giro dramático. La agonía del Guadalajara es ahora vida pura. Chivas ha resucitado desde la salida del técnico José Manuel de la Torre y la llegada del argentino Matías Almeyda. Cuatro victorias de forma consecutiva, tres en Liga y una en Copa, han devuelto la sonrisa al conjunto tapatío. Pero este domingo, tendrá un complicado examen frente a Pumas.
Y será difícil este duelo de la fecha 12 por diversos factores: la altura de la capital del país, el calor de mediodía en Ciudad Universitaria y, por supuesto, la calidad de un rival que atraviesa un buen momento y que ha hecho de su casa una fortaleza en el actual Torneo Apertura 2015. La UNAM llega al encuentro con 22 puntos y el Rebaño Sagrado, gracias al repunte de mano del ‘Pelado’ Almeyda, suma 16.
El conjunto tapatío está consciente de lo que se topará. “Sin duda es una de las plazas que cuesta más, jugar en Ciudad Universitaria a las 12 del día. Sabemos que es un rival difícil, que hoy viene enrachado, que de local no ha recibido gol, va invicto y es un equipo que también trae confianza. Será un partido muy importante, pero Chivas en cualquier lugar debe jugar al tú por tú y hacer ver que también allá somos locales. Creo que será un partido interesante y buscaremos el arco contrario”, explica Marco Fabián.
Chivas atraviesa también por un buen momento. Sin embargo, ambos cuadros viven realidades distintas, mientras los universitarios piensan en la parte alta de la clasificación, los rojiblancos no se quitan de la mente la necesidad de sumar en cada encuentro para salvarse del descenso.
“Tenemos que estar muy claros, hoy más que nunca lo que nos ha dado es trabajar con la misma humildad, los pies sobre la tierra y sabemos que cada fin de semana jugamos una final. Llevamos cuatro triunfos, hay confianza y alegría como siempre que se gana, pero vamos a mitad del camino, las metas tenemos que cumplirlas, alejarnos del descenso, pensar después en Liguilla y por qué no, en el campeonato. Vamos paso a paso y así por el camino que vamos, no podemos bajar la intensidad”, añade el volante.