Menos camarón y más sardina

El calentamiento global afectará la distribución de los recursos pesqueros en el planeta en los próximos años, lo que impactaría en la seguridad alimentaria en varios países.

En el caso de México, la producción de camarón se verá dañada, en tanto, se espera que la pesquería de sardina se vea beneficiada por el aumento de temperatura, advirtió el doctor Alonso Aguilar Ibarra, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc), de la UNAM.

Los estudios elaborados por Alonso Aguilar y otros investigadores del mismo Instituto, concluyeron que la producción de camarón será afectada negativamente por la temperatura en aproximadamente 1.1% de decremento en captura por cada 1% de incremento en la temperatura.

En cambio, la pesca de sardina se verá beneficiada en aproximadamente 4% de aumento en producción por cada 1% de aumento en la temperatura para el año 2030.

La mayoría de estos cambios se observarían en el noroeste mexicano del Pacífico, donde el sector pesquero tiene un papel importante en la economía local.

Aguas más cálidas

Los cambios en los patrones de circulación oceánica, como la cinta transportadora del Atlántico, afectan a las poblaciones de peces y la red trófica acuática. Asimismo, la excesiva acidez de los océanos podría afectar al medio ambiente marino a través de la deficiencia de carbonato de calcio para algunos organismos marinos, detalló el especialista en economía y gestión ambiental.

“Nuestra contribución como especialistas en economía y medio ambiente, consiste en realizar un análisis de impacto del cambio climático, en el que examinamos dónde hay mayor vulnerabilidad, ya sea por cultivo, pesquería o región. Posteriormente priorizamos las regiones o actividades vulnerables y luego planteamos acciones de adaptación”.

Según el doctor Aguilar, los efectos tanto físicos como ecológicos del cambio climático, incluyen alteraciones en la distribución y abundancia de los recursos pesqueros; además de que los impactos económicos se expresarán tanto en ganancias como en pérdidas.

Dirección General de Divulgación de la Ciencia, UNAM