ruben.migueles@eluniversal.com.mx
La economía mexicana se mantiene por debajo de su tendencia de largo plazo con una perspectiva a la baja, lo que significa que se encuentra en una fase de desaceleración, de acuerdo con los resultados más recientes del sistema de indicadores cíclicos que elabora el Inegi.
El indicador coincidente, que refleja el estado general de la economía, se ubicó en 99.9 puntos, es decir un retroceso de 0.02 unidades respecto al mes anterior, con lo que acumula nueve meses a la baja y siete meses ubicándose por debajo de 100 puntos, su tendencia de largo plazo.
Cuando el indicador coincidente decrece y se ubica por debajo de su tendencia de largo plazo significa que la economía se encuentra en una etapa de desaceleración o recesiva, de acuerdo con el enfoque del “Ciclo de Crecimiento”.
Por su parte, el indicador adelantado ―que busca señalar anticipadamente los puntos de cambio del indicador coincidente― se ubicó en junio por debajo de su tendencia de largo plazo, al observar un valor de 99.4 puntos y una disminución de 0.03 puntos contra mayo pasado, con lo que acumula 20 meses seguidos a la baja y nueve meses por debajo de su tendencia de largo plazo, es decir de 100 puntos.
Los resultados del indicador coincidente en mayo como del indicador adelantado en junio confirman el debilitamiento de la economía mexicana en el segundo trimestre y el menor crecimiento que se espera en la segunda mitad del año.
De abril a junio el Producto Interno Bruto (PIB) del país registró un crecimiento de 2.4% respecto al mismo periodo de 2015, tasa inferior a la de 2.6% reportada en el primer cuarto del año, de acuerdo con estimaciones preliminares del Inegi.
Las expectativas de los especialistas del sector privado sobre el crecimiento económico del país también disminuyeron, al pasar de 3.2% en julio de 2015 a 2.3%, conforme a los resultados más recientes de la encuesta que levanta Banco de México entre analistas financieros.
Dicha estimación de expansión económica para este año implica que durante el segundo semestre la economía crecerá a tasa de 2.1%, cifra inferior al 2.5% reportado en la primera mitad del año, conforme a las cifras oportunas del PIB dadas a conocer por el Inegi. De confirmarse dicha proyección, sería el crecimiento económico más bajo de los últimos dos años.
Con la nueva información, tanto el indicador coincidente como el adelantado mejoraron su desempeño respecto al mes precedente, pero la tendencia sigue siendo negativa.
El enfoque de “Ciclo de crecimiento” identifica las desviaciones de la economía respecto a su tendencia de largo plazo. Por tanto, el componente cíclico de las variables que conforman cada indicador compuesto se calcula como la desviación de su respectiva tendencia de largo plazo.
Mientras los indicadores coincidente y adelantado continúen decreciendo y la brecha respecto a su tendencia de largo plazo se siga ampliando, las expectativas para la economía mexicana serán menos favorables.