En el mundo de las motos existe un dicho: “Hay dos tipos de motociclistas: el que ya se cayó y el que se va a caer”. La frase es tan rotunda como una ley de la física. Dados los múltiples obstáculos a los que se enfrentan diariamente los conductores de estos vehículos, inesperadamente pueden visitar el piso, provocándose lesiones leves o, en casos extremos, la muerte.
Precisamente pensando en la seguridad de los motociclistas, Honda ahora hace uso de su sistema Riding Assist en las motos, una tecnología que si bien no es nueva ( inicialmente la conocimos como parte del robot ASIMO y después en el vehículo personal equilibrado UNI-CUB), funciona como una innovación franca. ¿Qué mejor que evitar las caídas de conductores? He aquí un ejemplo de buena adaptación de soluciones experimentales.