Hace 20 años, la selección mexicana sub-23 obtuvo un cardíaco pase para competir en los Juegos Olímpicos de 2004. El partido de semifinales del Torneo Preolímpico, en contra de la escuadra estadounidense, fue el más controversial y decisivo para que el equipo nacional llegara a la justa olímpica en Atenas. Texto: Liza Luna