"Jacinta es un cuerno de la abundancia. Hasta donde he probado, no hay ningún plato que no exceda las expectativas de su propio volumen"

Los heteros tienen sin embargo una afición que cuesta trabajo no compartir: las alitas de pollo.

Tal vez la torta fundacional de la historia de México es la torta de Armando Martínez, que Artemio de Valle Arizpe refiere en Calle vieja y calle nueva