Tres días intensos de conferencias, talleres, conversaciones. Un andar y andar con la mochila al hombro escuchando sobre los diversos efectos de cambio climático en nuestra vida diaria, en nuestro entorno, en nuestro andar cotidiano.

Tres días de ver y ayudar a asimilar a los casi 700 jóvenes y no tan jóvenes que se reunieron aquí para aprender sobre el cambio climático, para contribuir con su entusiasmo, su pasión y su tiempo a transformar una realidad que hace muy poco tiempo parecía casi irreversible.

En el andar matutino de caras ahora conscientes de los peligros que implica seguir contaminando nuestro aire, seguir dependiendo de energías fósiles que, además de ensuciar nuestra atmósfera empequeñecen nuestros bolsillos pues los costos de las energías limpias hoy por hoy ya compiten en los mercados internacionales y auguran una transformación equiparable a la revolución industrial.

Nuestro país es el onceavo mayor emisor de gases generadores del cambio climático en el mundo, esto ha generado que, al igual que ha sucedido a nivel global, la temperatura promedio del país haya ido aumentando constantemente, convirtiendo al año 2017 en el año más cálido del que se tenga registro a nivel global pero también en nuestro país.

En esos salones y pasillos en la Ciudad de México tuve la oportunidad de entrevistar al autor intelectual de este enorme movimiento mundial. Al Gore, un hombre con un gran talante, pero sobre todo una gran pasión por lo que está haciendo. Su activismo, confiesa, lo ha llevado de estar caminando en los pasillos de la Casa Blanca, a participar en protestas contra las políticas de Trump afuera de la misma.

Señala que “desafortunadamente, los eventos climáticos cada vez más extremos se han convertido en más frecuentes y más severos y lamentablemente eso es una tendencia que se espera continúen y se incrementen”.

Hay esperanza, me dice el ganador del Oscar “la disponibilidad de las soluciones es mucho más asequible ahora. México ha establecido el récord mundial en contratos con el precio más bajo tanto en energía solar como en eólica”. La realidad mundial para los más pobres y vulnerables es que en poco tiempo tendrán energía directamente del sol como ya ocurre en muchos países del mundo.

Ser Mentora en el entrenamiento y colaborar para capacitar a 23 nuevos líderes por el clima ha sido una gran experiencia. Sus sonrisas, su emoción, pero sobre todo su compromiso para trabajar en favor del planeta y lograr una transición hacia una economía más justa y de energía limpia ha sido una gran inspiración. Nuestra causa no está perdida, cada vez somos más y el cambio ya es irreversible.

Hay una gran unanimidad entre la comunidad científica acerca de la Realidad del Clima y sin embargo, parece que en Estados Unidos su actual presidente ha preferido voltear la cara a la realidad del clima y al futuro. Volver sobre los pasos alcanzados y vigorizar la industria de combustibles fósiles que camina lenta pero firmemente a la extinción.

Al Gore, se reunió con tres de los cuatro candidatos a la Presidencia. Reuniones privadas en las cuales compartió su visión sobre el futuro energético del mundo y en particular de México, reuniones en las que empujó por lograr un compromiso para que el cambio climático y la transición energética permeen en la agenda política de las campañas y más allá de las campañas. Ojalá lo haya logrado.

El salón de conferencias vivía un ambiente festivo las últimas horas. No es sólo que los asistentes se han organizado para llevarle mariachi y cantarle las mañanitas por su próximo cumpleaños el 31 de marzo que cumple 70, sino especialmente por la gran esperanza que este increíble personaje ha inyectado a cada uno de los asistentes, de que aún con todas las noticias en contra hay espacio para creer vehementemente que el cambio es posible y ya se está viviendo.

Dejar un mundo mejor para las generaciones futuras aún es un sueño realizable si lo intentamos juntos, tu, yo, cada uno de nosotros.

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