Ambos presidentes le hablaron a sus propias audiencias en discursos más bien conciliadores, en los que se halagaron uno al otro. A diferencia de lo que algunos esperaban, no hubo afrenta directa en el discurso del Presidente Donald Trump . Si bien tocó el espinoso tema de la migración, omitió referirse a la construcción del muro y también a la Guardia Nacional. No hubo ofensa ni humillación al menos por el momento.

Sin embargo, el discurso del Presidente de México fue algo distinto a lo que quizá se esperaba. Las múltiples muestras de agradecimiento cayeron en un exceso, especialmente cuando enfatizó que Donald Trump ha tratado a México con “cordialidad y respeto” y que nunca ha habido imposiciones de su parte. Tal vez al Presidente López Obrador se le cayeron las notas con los datos del trato a los migrantes mexicanos o a los jóvenes soñadores del programa DACA, de sus recientes visitas para presumir el muro o de sus declaraciones sobre la Guardia Nacional en la frontera. Los halagos del presidente de México llegaron al exceso de comparar a Trump lo mismo con Lincoln que con Washington. Y si bien Donald Trump ha sido menos “elocuente” en sus redes sociales, aún quedan muchas horas de la visita. Habrá que estar pendientes

Twitter: @solange_

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