En los últimos 26 años hemos visto mejoras importantes -no suficientes, pero sí importantes- en la vida de las mujeres y las niñas para alcanzar la plena igualdad. Con el Covid-19 se ha incrementado las brechas de género y las mujeres han sido las más afectadas porque han tenido que dejar sus trabajos, o combinarlos con los trabajos de cuidado en el hogar y con sus familiares cercanos. Si la situación es difícil para el promedio de las mujeres, imaginemos cómo es para los grupos en situación de mayor vulnerabilidad: mujeres indígenas, mujeres afrodescendientes y mujeres jóvenes.
Este 29 de marzo tenemos el honor de ser el país que dará la señal de salida al Foro Generación Igualdad, un espacio convocado por ONU Mujeres y copatrocinado por los gobiernos de México y Francia con el liderazgo y la participación de la sociedad civil para ponernos manos a la obra. El FGI es un espacio de colaboración plural para acelerar la acción por la igualdad hacia 2030. Esta colaboración plural se traduce en que, por primera vez, estados, organizaciones de mujeres diversas, y organismos internacionales trabajaremos coordinadamente para establecer acciones concretas que nos permitan avanzar en los objetivos que tenemos por delante.
La misión es clara: tenemos que mejorar radicalmente la calidad de vida de las mujeres y las niñas en todos los ámbitos de la vida. Ya no es aceptable un mundo sin igualdad. Es momento de poner atención y dar soluciones a los problemas que dejan en desventaja a las mujeres.
Para alcanzar la igualdad, tenemos que ser radicales y comprometernos con generar bienestar incluyendo a las mujeres en todas las decisiones públicas. No debemos aceptar ningún retroceso o no alcanzaremos las metas que nos hemos propuesto en el corto y mediano plazo.
Con el FGI llega la oportunidad de cooperar, escuchar a todas las voces, y trabajar conjuntamente. Porque los problemas que vivimos en materia de desigualdad no son ajenos a lo que viven las mujeres de otras latitudes, y por eso es fundamental actuar y comprometernos desde todos los ámbitos. Estos tres días de trabajos no son sólo para intercambiar ideas. Debemos salir con acciones claras y pasos a seguir. Debemos asumir que este no es el siglo de las promesas, es el siglo de las acciones.
Ahora es el momento de que todas las mujeres seamos escuchadas y denunciar lo que no nos gusta, como lo hacen cada vez más mujeres; invitar a los hombres a reconocer, defender e impulsar la agenda feminista; implementar acciones cotidianas a favor de la igualdad hasta que se vuelvan costumbre; y finalmente celebrar nuestras victorias.
En esta década de la acción, el mundo será feminista o no será. La agenda 2030 global y lo que se impulsa desde lo local nos marcan metas concretas para el avance hacia la igualdad de género, para cerrar las brechas de desigualdad que viven las mujeres en situación de mayor vulnerabilidad. En esta era que nos toca vivir, trabajemos para que la recuperación tenga una visión feminista, con más diálogo, entendimiento y soluciones efectivas; porque en el Foro Generación Igualdad sabemos que éste es el momento de las mujeres ¡Es tiempo de la acción!
