Reporteros Sin Fronteras (RSF) pidió una investigación inmediata del asesinato del periodista mexicano Carlos Domínguez, y alertó sobre “una nueva ola de violencia” contra profesionales de los medios en este año de elecciones federales.

Domínguez, de 77 años, fue apuñalado el pasado sábado en Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas, por un grupo de hombres armados y encapuchados que lo interceptaron en su automóvil cuando circulaba a plena luz del día junto con familiares.

El ahora fallecido, con cerca de cuatro décadas de experiencia como periodista, trabajaba en el diario Noreste Digital y en la página web Horizontede Matamoros, y destacaba por ser muy crítico con las autoridades locales y denunciar actos de violencia orquestados por el crimen organizado.

“Es alarmante constatar que, para los periodistas en México, 2018 comienza tan mal como terminó 2017”, lamentó en un comunicado el director de la oficina de América Latina de RSF, Emmanuel Colombié, quien recordó que el año pasado el país fue el segundo más mortífero para la prensa, por detrás de Siria.

La organización pidió una investigación inmediata e independiente sobre lo sucedido y resaltó que, tal y como se prometió en 2017, el Ejecutivo mexicano “debe redoblar sus esfuerzos para garantizar la seguridad de los periodistas y fortalecer los mecanismos de protección existentes.

“Este compromiso es aún más importante, dado que este año se realizarán en México elecciones generales, período en que la prensa suele ser tomada como blanco”, concluyó la ONG, que señaló que Domínguez es el primer periodista asesinado en México este año.

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