El Sistema de Transporte Concesionado de la Ciudad de México está sumido en una crisis económica a raíz de la pandemia por Covid-19; sólo en los primeros tres meses de la emergencia sanitaria tuvo pérdidas por 3 mil 300 millones de pesos.
“El transporte público se encuentra en una crisis (...) El sistema concesionado del transporte únicamente vive de la tarifa del usuario y no lo hay, pues hubo una caía de hasta 75%.
“Es terrible el impacto económico, en los tres primeros meses hubo una pérdida de 3 mil 300 millones de pesos”, comentó Nicolás Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM).
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Expuso que, pese a que mucha gente se resguardó en su casa, el transporte no dejó de prestar servicio, lo que implicó una manera de operar distinto, cambiando de itinerarios y sacando flota de operación para contar con ciertos niveles de servicio.
“Desde el inicio de la pandemia no han operado al 100% las rutas, hay algunas en las que se van alternando para trabajar; un día, un número de unidades, otro día, otros, con la intención de que puedan producir algo”.
Sin embargo, otro de los problemas por el que se han visto afectados es que, ante el miedo a los contagios por Covid-19, muchas personas han preferido utilizar otros medios de transporte, como bicicletas y principalmente transporte privado.
Dijo que las personas que trabajan en oficina han tenido que incorporarse poco a poco, y el problema es que la gente, con el miedo al transporte público, ha empezado a ocupar otro medio de transporte particular y esa es una implicación extra que genera la pandemia.
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No es tiempo de un aumento
Aunque algunos grupos de transportistas han solicitado un incremento al Gobierno capitalino en las tarifas del transporte concesionado, el presidente de la AMTM consideró que, aunque sí es necesario, no es momento para que se aplique, pues la población ha estado muy afectada por la crisis económica.
“Sí es necesario un incremento, pero no es el momento idóneo por muchas cuestiones. Tomando en cuenta el número de desempleos que ha ocasionado el Covid-19 y que esas personas no tienen recursos para día con día incrementarles el costo, sería un impacto todavía peor”.
Comentó que los negocios cerrados han impactado a millones de personas, por lo que no se puede hacer esta demanda.
“Sí es necesario, tomando en cuenta que las inversiones de modernización del sector son muy elevadas, la conversión de modelo de hombre camión a empresa de transporte es muy caro”, agregó.
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Rosales mencionó que la línea metropolitana cuesta 100% más y la calidad del servicio no es mejor, por lo que planteó establecer un mecanismo que permita tener una tarifa técnica, la cual deje tener un punto de equilibrio para la operación del transporte y también que no sea a cargo del usuario, por lo que pidió un subsidio para los operadores de transporte para que se pueda prestar un buen servicio. “Aquí es donde podemos observar que había un importante rezago en el transporte público, el cual se agudizó por la pandemia. El prepago por tarjeta se limita a los modelos de transporte del Gobierno, pero 70% de los viajes se hacen en modelo concesionado, que es donde vamos con mayor rezago”.
Dijo que la asociación ha trabajado en el cambio de modelo hombre camión con microbuses y les ha dado buenos resultados, al lograr la sustitución de 4 mil 500 unidades obsoletas por mil 700 con mayor capacidad para usuarios y para desarrollo tecnológico, así como de rastreo.