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Los trabajos para la modernización del Centro de Transferencia Modal San Lázaro han dividido opiniones entre los usuarios y vecinos de la zona.

Mientras unos celebran el cambio que vendrá, otros se quejan por las molestias que causan las obras y que se reubicó temporalmente el paradero sobre calzada Ignacio Zaragoza, cerca del Metro Moctezuma.

“Qué bueno que lo hicieron, desde bien temprano ya te encontrabas a puro teporocho que siempre estaban pidiendo dinero y en la noche daba miedo pasar. Te asaltaban o te ‘taloneaban’ a cada rato”, relató Lorena, de 35 años, empleada de una empresa de camiones de transporte de pasajeros.

En contraste, Julián “N”, quien fue a recoger a su hija a la TAPO, pues venía de Veracruz, se quejó del desorden. “¡Qué relajo entrar a recoger a mi hija, ella viene de Veracruz!”, quien comentó molesto mientras esperaba en una fila conformada por unos 10 vehículos particulares para poder entregar su auto al valet parking que da servicio en la terminal camionera ubicada en ese mismo lugar.

Esto se debe a que en el predio donde se ubicaba el estacionamiento de la central se instaló el paradero provisional para las más de 15 rutas de transporte público que dan servicio en el paradero.

Sobre la avenida Eduardo Molina, a un costado de la entrada a la TAPO, afuera de los tapiales de la zona donde estará la plaza comercial del nuevo Cetram, los ambulantes retirados para dar paso a los trabajos, colocaron sus puestos

En el paradero provisional que recibe a rutas provenientes de Texcoco, Chapingo y Tepetitlán, Roger, chofer de la ruta que corre de San Lázaro a Texcoco vía Lago, se queja de que se forma mucho tránsito vehicular para ingresar a los andenes.

Los vecinos que habitan en las colonias aledañas temen que los trabajos en el predio puedan provocar daños a sus viviendas.

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