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Los Ángeles.— No hay nada que detenga la persistencia de un buen detective, así como como la del actor Mahershala Ali, quien tras ganar su Globo de Oro como Mejor actor por Green book: una amistad sin fronteras (2018), ahora es el protagonista de True detective para la cadena HBO.
A partir de este domingo, la serie que hizo época en 2014 con Woody Harrelson y Mathew McConaughey —y que sufrió un traspié en su segunda incursión con Colin Farrell y Vince Vaughn en los papeles protagónicos—ahora en su tercer temporada Ali fui invitado a formar mancuerna con Stephen Dorff.
“El programa te permite caminar dentro de un mundo donde por su narrativa llegas a creer que todo es real, haciéndote sentir que eres esa mosca pegada a la pared desde donde puedes observarlo todo”, apunta Ali a EL UNIVERSAL, quien personifica al detective Wayne Hays de un poblado del noreste de Arkansas, EU, de fines de los años 50.
La tenacidad de Ali lo llevó a él mismo contactar al creador de True detective, Nic Pizzolato, para compartirle mediante fotos de su propia familia, que afroamericanos sí llegaban a tener puestos detectivescos en la fuerza policiaca en los años de racismo en las calles de su país. El productor quedó tan cautivado con la idea, que cambió la complexión de su protagonista y reclutó a Mahershala de inmediato, quien ya tenía entre sus medallas el Oscar de Mejor actor de reparto por Moonlight (2016).
Para True detective, Ali tuvo que interpretar tres versiones de su mismo personaje, ya que la historia se cuenta a distintos tiempos, que va desde que comienza a seguir la pista de la desaparición de dos niños en Arkansas, hasta los años de retiro de Hays, cuando ya se ha publicado un libro sobre este caso que no se resolvió del todo y los fantasmas del pasado regresan a acosarlo.
“En cualquier momento que un personaje llega a mis manos como Wayne Hays, que tiene un nivel de dimensión interesante, sé que estoy ante una persona única y por ello lo debo actuar así”.
